La discriminación sigue siendo generalizada. Género, nacionalidad, edad, origen étnico, orientación sexual o la religión desafortunadamente pueden ser la causa de alguna forma de discriminación
El 1 de marzo las personas en todo el mundo se unen para celebrar el Día de la Cero Discriminación. Este año, ONUSIDA destaca la imperiosa necesidad de actuación frente a las leyes discriminatorias.
La discriminación sigue siendo generalizada. Género, nacionalidad, edad, origen étnico, orientación sexual o la religión desafortunadamente pueden ser la causa de alguna forma de discriminación.
A nivel mundial, en sólo cuatro de 10 países, existe un número igual de niños y niñas que asisten a la escuela secundaria. Todavía 75 países tienen leyes que criminalizan las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo.
“Cuando los más marginados y vulnerables enfrentan la discriminación y el abuso, a todos nos perjudica. Las Naciones Unidas están fuertemente comprometidas con la defensa de los derechos humanos y la dignidad para todos”. Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki -moon.
La discriminación en los centros de atención de salud también continúa siendo ampliamente reportada.
Imaginamos a una mujer joven recién diagnosticada con VIH, que es informada por su médico que debe ser esterilizada; una trabajadora sexual enfrentándose a la violencia o al abuso de una enfermera; una persona con discapacidad que se ve negado el acceso al asesoramiento sobre salud sexual; un hombre gay atemorizado de revelar su orientación sexual al personal médico; una persona usuaria de drogas que muere después de que se le negara el tratamiento; o una persona transgénero que intenta suicidarse después de haber sido rechazada en una clínica.
Los centros de atención de la salud deben ser considerados como un ambiente seguro; sin embargo, estos casos están ocurriendo con demasiada frecuencia en todo el mundo. Los obstáculos que impiden el acceso a los centros de atención de la salud, incluyendo a los servicios de pruebas, tratamiento y atención del VIH, deben ser eliminados.
Movilízate para cambiar las leyes discriminatorias
En muchos países, las leyes crean diferencias en el trato entre personas, muchos quedan excluidos de los servicios básicos o sufren restricciones en su manera de vivir solamente por ser ellos mismos. Dichas leyes son discriminatorias; niegan los derechos humanos y las libertades fundamentales.
Los Estados tienen la obligación moral y legal de eliminar las leyes discriminatorias y aprobar otras que protejan a las personas. Esto aparece recogido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, los tratados sobre los derechos humanos, la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y en otros compromisos internacionales.
Acabar con la discriminación y cambiar las leyes es una responsabilidad común. Todos podemos participar en la lucha contra la discriminación y podemos marcar la diferencia en mayor o menor medida. La campaña del 2019 para el Día de la Cero Discriminación invita a las personas a actuar contra las leyes discriminatorias en sus respectivos países.