OTRAS FORMAS DE MIRARNOS Y EL RECONOCIMIENTO
A Propósito del Día del Periodista
Por: Martha Alzate
La Cebra Que Habla es un proyecto de periodismo de historias que incorpora desde su concepción una propuesta: Otras formas de mirarnos.
Un periodista es, en esencia, un curioso, que se interesa por lo que sucede a su alrededor. Allí donde es menester profundizar en lo humano, siempre un periodista prestará el gran servicio de ayudarnos a reconocer.
El reconocimiento es, en todo sentido, el punto de partida del humano como ser social. Nos reconocemos a nosotros mismos para entender que somos diferentes, aunque compartamos un entorno con otros parecidos a nosotros, pero distintos en algunos aspectos. Reconocemos el lugar que habitamos y la manera cómo nos relacionamos con él y con las especies con las que lo compartimos. Damos especial reconocimiento a personas e instituciones que prestan un servicio a la comunidad o que se destacan por sus habilidades, logros, o aportes en diferentes campos del saber y de la actividad humana, entre otras formas de reconocer.
Así, reconociéndonos, nos miramos, y de esta manera establecemos relaciones, definimos límites (entre los seres humanos, entre estos y la naturaleza, etc.), y vamos consolidando lo que se considera “socialmente aceptado”.
Por eso, el periodismo que podríamos denominar esa “primera mirada”, nos ayuda a comprendernos y a definirnos en muchos aspectos.
El periodista juega un importante papel en la configuración de nuestro mundo a partir de sus relatos, historias que en mayor o menor grado van definiendo la imagen que nos hacemos de nuestra situación y posición en el tiempo y lugar que nos fue dado vivir.
¿Cómo nos miramos, nos relacionamos, nos reconocemos, nos relatamos? Para intentar responder estas preguntas surgió hace ya casi dos años el proyecto periodístico La Cebra Que Habla, portal web de territorio, ciudad y ciudadanía.
La Cebra Que Habla es un proyecto de periodismo de historias que incorpora desde su concepción una propuesta: Otras formas de mirarnos.
¿Qué significa esta propuesta? Mirarnos de otra manera, diferente a aquellas que habitualmente hemos usado para narrarnos. Desafiar a los discursos tradicionales y con fuertes nexos con los poderes de toda índole, que nos presentan a las “individuos importantes” como únicos protagonistas de los acontecimientos, y a los “sujetos comunes y corrientes”, como víctimas o simples beneficiarios de un destino ajeno a ellos.
Nada ofende más que el desconocimiento. El “ninguneo”, palabra usada por el mexicano Octavio Paz para dar cuenta del tipo de relaciones sociales excluyentes en su país, es una afrenta imperdonable porque diluye al individuo. Sin embargo, todos los días lo repetimos al construir nuestros imaginarios basándonos principalmente en los poderosos, desconociendo el valor de las historias de vida de los anónimos, ciudadanos actuantes y participantes de la construcción colectiva.
Mirarlos de otra manera, esforzarnos por hacerlos visibles, y mostrar el aporte que hacen desde cada una de sus vivencias, pone el acento de nuestro relato común en un objetivo completamente diferente al que hemos aceptado hasta ahora. Es una manera de concebirnos como ciudadanos, en democracia, en igualdad de derechos y deberes.
Desde La Cebra Que Habla trabajamos por este tipo de reconocimiento, como fundamento de la construcción de una ciudadanía activa. Aquella que tiene elementos de juicio para hacerse una opinión propia de los hechos y de sus circunstancias. Propendemos por una sociedad que conozca y difunda sus complejidades, más que por aquella que esconde, engaña y trafica, aprovechándose del desconocimiento de la comunidad de la multitud de temas que constituyen la vida social. Y lo hacemos a partir de las historias, buscando siempre en ellas esa Otra Mirada.
Otras Formas de Mirarnos constituye nuestro aporte desde La Cebra Que Habla a la construcción de ciudadanía, brindando herramientas para que ella pueda hacerse cargo directamente de entender y gestionar los vínculos sociales y las relaciones con el entorno que habita.