Los cálculos de Arnall lo llevaron a concluir que el tercer lunes de enero de cada año es "es particularmente deprimente". Imagen extraída de Getty Images
El tercer lunes de enero, es conocido en inglés como “Blue Monday”, que en español traduce “lunes triste”.
Texto de BBC Mundo
Puede que no lo hayas notado, pero se supone que este es el día más triste del año, al menos en el hemisferio norte.
Según el psicólogo Cliff Arnall, el tercer lunes de enero es el día más triste del año. Imagen extraída de Getty Images
En muchos lugares llueve y hace frío. Pocos bolsillos se han recuperado de los excesos navideños. Y de las resoluciones de año nuevo, ¿quién se acuerda?
Por eso este 21 de enero, el tercer lunes de enero, es conocido en inglés como “Blue Monday”, que en español traduce “lunes triste”.
Las redes sociales están llenas de “mensajes de ánimo” para pasar estas 24 horas deprimentes. Este lunes en Twitter es tendencia la etiqueta #BlueMonday.
¿Pero de verdad es un día triste? ¿De dónde viene esta idea?
El día malo
Todo empezó en 2005 con el intento del psicólogo Cliff Arnall de diseñar una fórmula para calcular cuál es el peor día del año.
Las deudas, las falta de motivación, los propósitos fallidos y el clima son algunos de los factores que desencadenan el llamado “Blue Monday”. Imagen extraída de Getty Images
Además del clima, los excesos navideños y las frustradas resoluciones de año nuevo, Arnall también introdujo en sus cálculos los niveles de motivación y la necesidad de tomar medidas.
Su resultado ha sido cuestionado pero cada año se comenta, se critica y se debate sobre este día.
El origen de esta fórmula fue una campaña publicitaria para la compañía de viajes Sky Travel, ya desaparecida.
Arnall, que trabajó en un centro adjunto de la Universidad de Cardiff (Gales) y ahora imparte cursos sobre la felicidad y el bienestar personal, ha sido criticado por algunos compañeros de profesión.
Los cálculos de Arnall lo llevaron a concluir que el tercer lunes de enero de cada año es “es particularmente deprimente”. Imagen extraída de Getty Images
Según contó Arnall al diario británico The Telegraph en una entrevista en 2010, al principio le pidieron que calculara “cuál sería el mejor día para planificar las vacaciones de verano”.
Pero Arnall, pensando en lo que le cuentan sus pacientes, analizó los factores que estresan a quienes acuden a sus talleres y concluyó que el tercer lunes de enero “es particularmente deprimente”.
El neurocientífico Dean Burnett, que trabajó en el departamento de psicología de la británica Universidad de Cardiff, tachó la fórmula de “pseudociencia sin sentido” en un artículo en el diario británico The Guardian.
Para el científico Ben Goldacre, las ecuaciones de Arnall son “estúpidas y algunas de ellas ni siquiera tienen sentido matemático”, escribió en The Guardian.
“No es ninguna sorpresa, puesto que vienen preparadas por compañías de relaciones públicas que solo buscan el nombre de un científico”, agregó.
Algunas personas y compañías aprovechan esta fecha para enviar mensajes motivacionales. Imagen extraída de Getty Images
Mensajes felices
La fecha en el calendario ha servido para que las redes sociales se inunden de mensajes de ánimo y buenos propósitos para contrarrestar el que se supone que es el día más triste del año.
Pero también hay empresas que intentan aprovechar el tirón de este día para ofrecer algún producto con el que ayudar a levantar el ánimo.
De hecho, en 2016 Arnall hizo parte de la campaña #StopBlueMonday que impulsa el gobierno de las Islas Canarias en la que dice “no dejes que esta fórmula te dé permiso para reír o llorar…Estas 24 horas te pertenecen, no dejes que nadie te las arrebate, ni siquiera un tal Cliff Arnall”.
*Esta es una versión actualizada de un artículo publicado originalmente el 18 de enero de 2016.
El dólar está cayendo, y las políticas de Trump no ayudan a paliar la situación. De hecho, no han hecho más que acelerar el proceso de decadencia de la moneda.
Trump no es un aliado ruso, ni chino, pero nadie como él ha acelerado el proceso de decadencia de su país y lo ha alejado tan dramáticamente del panorama internacional.
1. Estados Unidos: los mejores:
Estados Unidos no es potencia mundial después de la segunda guerra mundial: comprender su protagonismo planetario implica irse atrás en su historia, untar sus manos de sangre indígena y mexicana, y llenarlas de la gloriosa laboriosidad de una industria que no se compara con ninguna en el mundo: ni siquiera la Inglaterra victoriana es equiparable a esta imperiosa necesidad de acorralar los montes y montar fábricas, industrias y ferrocarriles que absorbieron la energía –además de matar indios y quitarle tierra a los mexicanos- a la muy eficiente máquina social estadounidense.
Fue una sociedad prematura en todo.
Aprovechando la liberalización de la tierra, desde la segunda mitad del siglo XIX tiene unas cifras de desarrollo económico e industrial sorprendentes.
Fundición de Bridgewater, Inglaterra. imagen extraída de Wikipedia
Es un proceso en el que el Dólar estaba equilibrado con el trabajo real del estadounidense promedio.
Hacia los años 20 el sistema financiero especulativo mostró las garras de un modelo económico desregularizado que explotó en el Crack del 29, pero que, al mismo tiempo, logró consolidar una de las leyes que garantizaría el peso económico de la sociedad norteamericana a través de la ley Glass-Steagal, que le permitió al gobierno regular la banca a través de las bancas de inversión y financieras.
Pero esta ley es vetusta o inútil si no se completa con el ciclo producido por la adquisición del oro propiciado justo después del Crack financiero, cuando una ley obligó a sus ciudadanos a desembarazarse del oro de sus dientes y colchones, y venderlo al estado por un precio establecido en dólares.
Aparece la reserva federal, y por arte de magia en un par de meses el precio del oro se había duplicado varias veces.
Ya el patrón del precio había dejado de ser el trabajo glorioso del siglo XIX, ahora lo era el oro. De esa manera, EE.UU ya tenía un oro que respaldara la circulación de dólares. De tal suerte que plantear la potencia estadounidense exclusivamente a partir de los tratados de la segunda guerra mundial, es desconocer todos estos precedentes que ya la hacían una gran nación.
Sin embargo, es innegable que a partir de la segunda guerra y su lugar geopolítico, los norteamericanos posicionan el dólar de dos maneras: uno, negociando con Arabia Saudí para que los intercambios de petróleo sean con dólares, y por otro lado consolida la moneda como la única de reserva internacional.
Dólar estadounidense. Imagen extraída de Pxhere
Doble ganancia, pues tanto los préstamos internacionales como las transacciones con petróleo necesitaban los dólares, lo que a su vez le daba una solidez enorme.
Pese a que desde los años 80 las reservas internacionales han diversificado las monedas, hasta hace muy poco la consolidación del dólar se sostenía en el pacto del petróleo con la moneda.
Hoy en el mundo existen billetes por un valor aproximado a los 580.000 millones de dólares circulando fuera de Estados Unidos, sin contar con las reservas secretas con las que puedan contar los países aliados de oriente medio y la misma China, cuyas estimaciones rondan otros 500.000 millones más.
El 60% de las reservas mundiales están en dólares, y un tercio del PIB mundial se presenta en países que miden su riqueza a partir de la misma moneda. La fórmula es muy sencilla: a mayor uso de su moneda en el comercio, aumento de la demanda fiat y mayor estabilización monetaria.
Lo anterior ayuda a explicar por qué para Estados Unidos ha sido más aceptable que las reservas mundiales diversifiquen sus monedas, a que se negocien las transacciones de petróleo en una moneda distinta al dólar.
Euro. Imagen extraída de Pixabay
Buenos ejemplos de ello son las intervenciones estadounidenses desde la década del 2000 en oriente medio: Irak, en el año 2003, antes de la intervención militar, había decidido dejar el dólar y pasar al euro. Luego aparece a amenaza de bombas fantasmas cuya existencia aún no se ha podido confirmar.
En Libia, antes de la intervención militar, Gadafi había decidido abandonar el dólar y comerciarlo con una moneda denominada “panafricana”, vinculada al patrón oro.
Poco después, en nombre de la paz y de la democracia, Gadafi aparece en una calle con un democrático tiro que le atravesó la cabeza.
Siria es el último de esos casos.
En el año 2006, su presidente, Bashar al-Ásad intenta negociar su petróleo con euro y no con dólares. Con una rapidez sospechosa pasa a ser un personaje peligrosísimo para la paz mundial, es el nuevo enemigo internacional, pero con un matiz: esta vez Rusia tiene intereses encontrados, su único puerto que da al mar mediterráneo se encuentra en Siria: el puerto de Tartus.
La guerra Siria ha sido la mayor tragedia del mundo en los últimos años. Lo anterior demuestra que tocar el intercambio de petróleo en una moneda distinta al dólar es arriesgar estabilidades nacionales y la vida de los mandatarios que se atrevan siquiera a mencionar su fantasma.
Petróleo. Imagen extraída de Wikipedia. Autor: Ivan Samano
Sin embargo, la crisis financiera del 2008 ha cambiado el panorama económico de una forma definitiva: por un lado, es el preámbulo de las criptomonedas, que a la luz de hoy circulan por el mundo con un valor que puede estar fácilmente superando los 400.000 millones de dólares.
Pero quizás el golpe más importante a la estabilidad financiera del dólar viene de los países que intentan experimentar con una moneda distinta al dólar para comerciar con petróleo, y que no carecen de poder militar, como en el caso de Libia e Irak.
2. Los nuevos juegos que retan al dólar:
Ya existen tratados comerciales que permiten canales de pagos con dos monedas distintas al dólar: el Rublo y el Yuan. Petro-rublos y petro-yuanes.
Pero el rublo es una moneda inestable, contrario al Yuan, que está respaldada por una economía que produce 12 billones de dólares anuales (12 trillon dollar), invierte casi 2 billones en infraestructura, y lidera el banco de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica), la muy atractiva alternativa del Fondo Monetario Internacional.
Participantes en la cumbre BRICS. Imagen extraída de Kremlin.ru
Aquí es muy importante la transición dinástica en Arabia Saudí. Mohamed Bin Salman, el príncipe heredero, quien con su proyecto “Visión 2030” se ha acercado peligrosamente a China, y ha abierto el boquete para hacer transacciones con el petro-yuan.
Y esto es delicado, porque la estabilidad financiera del dólar, que dejó de estar soportada por el oro desde hace mucho tiempo, está respaldada por el petróleo Saudí, cuyo primer lugar de producción se disputa con Rusia –el otro socio de China-.
Lo anterior pone a Estados Unidos en una situación bastante problemática, pues intentar intervenir en esta decisión no es solo afectar el sostén último de su moneda (Arabia), sino tensionar la relación de uno de sus mayores socios comerciales (China).
Pero no sólo esto ha sucedido en el panorama internacional. La segunda mitad de la década del 2010 ha sido muy intensa en tal sentido: el oro vuelve a tener un protagonismo como reserva mundial.
Es un hecho no oficial pero si evidente: los bancos centrales de Canadá, Francia, Alemania, China, Rusia y países árabes empiezan a tener departamentos especiales en el manejo de las reservas en oro, cuyo objetivo es desenclavarse del petro-dólar.
Oro. Imagen extraída de Pixabay
Desde 2015 China tiene uno de los logros más importantes en lo que a comercio internacional se refiere: el Yuan se convierte en moneda de reserva (lo que genera mayor confianza a los países que decidan negociar el petróleo en su moneda).
Ya en el 2017 el Yuan es la séptima moneda más empleada en el mundo, lo que genera otra decisión inédita: en el mismo 2017 el banco central europeo convierte 500 millones de dólares a yuanes como parte de su reserva, lo que a su vez se ha convertido en el preámbulo que por fin le alarga los pantalones a la Unión Europea.
El hasta hace poco socio incondicional de las políticas estadounidenses, ha decidido alargar pantalones respondiendo a los retos que Trump ha lanzado respecto a Irán: el presidente de los Estados Unidos se retira unilateralmente del pacto nuclear que se ha firmado con Irán, imponiendo sanciones a las empresas que hagan tratado con el país del medio oriente, situación que ha obligado a la Unión Europea a desligarse de la política norteamericana de una forma prematura (se ha demorado más de 50 años para ello).
Si se retiraba del pacto, demostraba su absoluta sumisión a las políticas del líder norteamericano, lo que sería una inequívoca señal de debilidad ante los países de la unión que observan en silencio el actuar de sus líderes.
Unión Europea. Imagen extraída de Wikipedia
En tal sentido han decidido dejar solo a Trump, y alargaron pantalones con dos estrategias: sancionar a las empresas que se retiren de Irán por miedo a las represalias de Trump, y crear un canal de pagos alternativo al dólar, lo que es otro boquete para desbancar al dólar como moneda privilegiada de transacción internacional, y lo que, paradójicamente, acerca a la unión europea con China que en esa misma línea ha abierto una línea de crédito a Irán por un valor equivalente a los 10.000 millones de dólares para pagar en yuanes.
Es el boquete para que la Unión Europea experimente lo que en Oriente Medio intentan hacer desde hace casi 20 años: formas de pago alternativas al dólar.
Habrá que esperar hasta Noviembre del 2019 cuando estas políticas se establezcan oficialmente.
Pero la Unión Europea ya planteó una posición a Estados Unidos, que está cada vez más lejos de sus aliados: América Latina, relegado como patio trasero, no ha merecido más que el desprecio por parte de su presidente quien insulta vigorosamente su gente, su cultura y sus acciones.
Tanto es así, que la única visita de un alto funcionario estadounidense a su aliado más incondicional, Colombia, se trató de una encomienda en la que el diplomático norteamericano intentaba mejorar la venta de carne de cerdo de su estado natal.
De Inglaterra también está lejos, pues el país europeo ha encontrado una agenda geopolítica fuera de EEUU y de la UE intentando consolidar un nuevo eje con la Commonwealth, y de la Unión Europea a la que sigue tratando como un padre regañón, sin darse cuenta que los intentos por eludir sus sanciones significan acercamientos de su más vital aliado con sus más encallados enemigos, y le abre el camino para experimentar con formas alternativas al dólar que lo ha logrado sostener en el lugar que ha ocupado por más de 50 años.
El dólar está cayendo, y las políticas de Trump no ayudan a paliar la situación. De hecho, no han hecho más que acelerar el proceso de decadencia de la moneda.
Trump no es un aliado ruso, ni chino, pero nadie como él ha acelerado el proceso de decadencia de su país y lo ha alejado tan dramáticamente del panorama internacional.
Insinuar que el horrendo atentado que mató a 21 jóvenes cadetes y dejó heridas a 65 personas “pareció” responder al objetivo de impedir el plantón que pediría la cabeza del Fiscal Martínez, constituye un despropósito de alguien parece hoy haber sido devorado por la degradación santista que a hombres de ideas los convirtió en “legionarios de la paz “.
El régimen de Santos respondió a un objetivo primordial: hacer que la injusticia, el atropello, el horror fueran considerados como hechos normales dentro del proceso de su “búsqueda de la paz”.
Una sociedad que los distintos medios de comunicación se encargaron de mostrar como una sociedad gobernada por una élite impoluta que, sin embargo, rápidamente se convirtió en lo que se llama una sociedad de provecho.
El caso Odrebrecht es apenas la punta del iceberg sobre lo que supuso la presencia de una monstruosidad jurídica que se hizo invisible gracias a la previa corrupción de ciertos representantes de la justicia, al desafuero burocrático aceptado como legítima estrategia electoral, típico recurso totalitario, para demostrar que nadie se salva de ser corrupto y sobre todo que el mal es inherente a la condición del ser humano.
Imagen extraída de Pixabay
La violentísima película de Passolini, “La República de Saló” ilustró crudamente la manera en que el poder en manos de desalmados lo que busca es degradar al ser humano al hacernos creer que lo más abominable es algo normal y de esta manera aceptar la sumisión como algo natural.
La retórica perversa del Fiscal Montealegre introdujo con sus caprichosas ejecutorias y señalamientos la idea de que el Habeas Corpus no existía y traicionar a un amigo es algo previsible en la trama de este film: inventarse un hacker para destituir unos altos militares de inteligencia son acciones que parecen sacadas de una novela de Jhon Le Carré.
El santismo no tuvo escrúpulo alguno para subvertir la ley y la justicia para obtener un premio Nóbel de papel.
En este proceso elaborado minuciosamente por una mente enferma los Fake News fueron puestos en circulación por esta fábrica de mentiras y difamaciones por parte de un periodismo que terminó por degradar el lenguaje, la ética profesional.
Lo que la llamada Izquierda no alcanzó a prever por pura ceguera moral era el hecho de que esta degradación de lenguajes y costumbres terminaría por arrastrarlos también a la degradación política y la complicidad ante la injusticia bajo el lema de que todo estaba permitido por la paz.
Imagen extraída de PxHere
Recordemos que después de cada grave atentado por parte de las FARC o el ELN el presidente Santos recurría a la misma explicación: “Esto fue un atentado de la Mano Negra, de la Derecha, no lo duden” ¿Qué pasó después del cruel asesinato de Ciro Guerra y del asesinato de once soldados por parte de las FARC y luego por Pablito?
Al perder el lenguaje su dimensión moral se precipita al abismo donde se justifica el crimen, la humillación a las víctimas.
Un atentado terrorista, recuerda Baudrillard, no es una revolución sino una implosión, o sea un agujero negro que se traga a quienes lo justificaron.
Insinuar que el horrendo atentado que mató a 21 jóvenes cadetes y dejó heridas a 65 personas “pareció” responder al objetivo de impedir el plantón que pediría la cabeza del Fiscal Martínez, tal como lo hizo en unas declaraciones Jorge Robledo, constituye un despropósito de alguien que fue un eminente profesor, un notable congresista y parece hoy haber sido devorado por la degradación santista que a hombres de ideas los convirtió en “legionarios de la paz “.
El video de Márquez es para la justicia universal un “enaltecimiento del terrorismo” que se paga con la cárcel.
Desde el día de su nacimiento, el portal web La Cebra Que Habla se propuso contar historias que nos ayuden a conocer y comprender el territorio, y por ese camino a la construcción de ciudadanía como forma de convivencia.
Como ha sido constante en la reciente historia de Colombia, en los momentos críticos no suelen aflorar el raciocinio y el espíritu de conciliación necesarios para sortear las dificultades.
Todo lo contrario: en circunstancias dolorosas abundan los empeñados en atizar la hoguera de los fundamentalismos y del espíritu de cruzada que suele caracterizar a quienes se sienten dueños de verdades reveladas.
Es lo que ha sucedido desde que se conoció la noticia del atentado terrorista en el que fueron asesinados al menos dos docenas de jóvenes policías en Bogotá.
Por lo visto, ese fue su único delito: haber elegido ser policías como profesión y como opción de vida.
Algo tan respetable como ser piloto, médico, cantante, torero, panadero o futbolista.
Pero esta Colombia que se apresta a celebrar el bicentenario de su independencia se empecina- como en los días de la Patria Boba- en dividirse en bandos irreconciliables y, por lo tanto, empeñados en borrar , material o simbólicamente, al contradictor.
Por eso no sorprende que, en cuestión de segundos se haya desatado un lenguaje de guerra que creíamos superado.
De un lado escuchamos el de sobra conocido discurso de la derecha extrema, expresada en el uribismo.
Del otro, la absurda posición de algunas izquierdas socialbacanas que pretenden banalizar la muerte de los jóvenes policías, contrastándolas con el también imperdonable asesinato de líderes sociales en el país.
Son dos dramas igual de terribles y de injustificables.
Desde el día de su nacimiento, el portal web La Cebra Que Habla se propuso contar historias que nos ayuden a conocer y comprender el territorio, y por ese camino a la construcción de ciudadanía como forma de convivencia.
En esa medida, condenamos los sucedido en Bogotá, así como condenamos los asesinatos sistemáticos de líderes sociales.
En ambos casos, la única reparación posible es la justicia.
Anualmente, en la tercera semana del mes de enero, en la ciudad de Sincelejo, Sucre, se celebra una de las mas tradicionales festividades colombianas, “La fiesta de corraleja”, fiesta taurina que dura varios días y que aparte de la Plaza de Toros, son realiza en las calles de la ciudad.
El pueblo sincelejano disfruta las fiestas del 20 de Enero. Esta celebración son conocidas como las fiestas del Dulce Nombre de Jesús están organizadas con la realización de eventos como las corralejas, reinado popular, espectáculos públicos, entre otros.
Les compartimos con agrado este especial donde contamos un poco de la historia de esta tradición cultural, opiniones divididas a favor y en contra de las corralejas, y la programación de las festividades para este año 2019:
Canción emblemática de las Fiestas del 20 de enero
Fiesta en Corraleja – Los Caporales del Magdalena
Fiesta en Corraleja
La Fiesta en Corraleja fue llevada del rodeo en los corrales de la grandes haciendas a las plazas de los pueblos. Los ganaderos enviaban toros criollos para que fueran manteados y banderillados por los aficionados a este espectáculo.
La corraleja es una estructura circular con palcos para los asistentes y un redondel en el centro para el juego de los toros.
Video realizado por el Centro de Ayudas Educativas de la Universidad de Córdoba
“Ya viene el 20 de enero, la fiesta de Sincelejo”. Esta emblemática canción es perfecta para presentarle a la ciudadanía el logo oficial de las Fiestas Enerinas 2019, que está inspirado en cuatro elementos representativos de la idiosincrasia sincelejana: la Plaza Cultural de Majagual, el caballito de palo, el sombrero vueltiao y la falda amplia, que evoca la colorida flor de bonche.
Además del reinado del Fandango, carrozas y cabalgatas, los paragüeros, banderilleros, capoteros y en especial los garrocheros, son los protagonistas de estas corralejas en las que espectadores disfrutan desde sus palcos el espectáculo que año tras año se ve en esta bonita ciudad.
Texto por Karla Fajardo
Los orígenes de la historia de las fiestas en corralejas vienen de la cultura Española en América, también se busca más allá en la misma cultura Cretomicénica del Egeo que es en la que el toro fue el animal sagrado, representativo de la fuerza y el poder.
Los primeros espectáculos taurinos se dieron en Creta, donde estos fueron representados en la fuerza del animal frente a la habilidad y destreza del hombre.
En la región caribeña llega desde España este representante a la par que el ganado. Datan de la época de la colonia, pero no como espectáculo taurino sino como una escuela de manejo del ganado.
Estas labores, fueron empezadas en haciendas y se fueron convirtiendo paulatinamente en un espectáculo presenciadas por amigos, parientes e invitados del dueño. Se puede notar que estos eventos se hacían coincidir con fiestas patronales religiosas, hecho que aún se practica en la mayoría de los pueblos.
Las primeras fiestas de toros, como carralejas, tienen lugar en Sincelejo en Octubre, el 3 de Octubre de 1845, en honor a su patrono San Francisco de Asís teniendo así, como primer escenario la plaza de San Francisco, y en ella se celebraron durante 85 años. Pasaron después a la plaza Majagual en el área urbana; En ese entonces se jugaron toros criollos del ganadero Benito Jaraba, traídos de Caimito. A estos espectáculos populares se les añadió más adelante: garrocheros a caballo con vara de cimbreadora, banderilleros y bandas de viento. Ramiro de la Espriella
Las corralejas antes eran construidas de una forma más primitiva, pero no por esto menos segura; en la construcción de las corralejas se utilizaron diversos materiales de acuerdo a la época y el crecimiento de las mismas.
Se utilizaban horcones de madera de monte “madrinas” y cañas de guaduas, que son las que sostienen el cerco de la corraleja, amarradas horizontalmente de las primeras. Estos materiales eran apropiados para las épocas de antes, cuando las corralejas eran muy pequeñas y no tenían palcos; en ella la gente se agolpaba a su alrededor.
Al trascurrir de los tiempos, las corralejas crecieron, haciéndose mas complejas y con la necesidad de hacerlas más cómodas para los espectadores, que cada vez eran más. Se adecuaron sitios para que estos pudieran ver los espectáculos sin ningún riesgo.
Apareció el primer palco, alrededor de la corraleja, en el que se observaban las comodidades del dueño del encierro y de sus allegados.
Más adelante se utilizó un nuevo material: varas de mangle, más flexibles y resistentes.
Los palcos fueron multiplicándose y se fueron utilizando materiales más duraderos y resistentes, para que soportaran el continuo y prolongado uso. Se empiezan a construir corralejas con una especie de listones de madera llamados “varetas” que son sujetados con clavos y pernos para una mayor seguridad.
Una de las tragedias en la historia de las fiestas en corraleja fue registrada el día 20 de enero de 1980, cuando los palcos de la plaza se vinieron abajo, sepultando entre toneladas de madera y escombros a cerca de cuatrocientas personas, debido al sobre cupo que existía esa tarde.
Esta trágica tarde puso fin a la tradicional fiesta hasta el año 1999, cuando se reanudaron.
Además del reinado del Fandango, carrozas y cabalgatas que se realizan en la capital de Sucre, los paragüeros, banderilleros, capoteros y en especial los garrocheros, son los protagonistas de estas corralejas en las que espectadores disfrutan desde sus palcos el espectáculo que año tras año se ve en esta bonita ciudad.
Una corraleja es un escenario cerrado, con palcos en madera que albergan a los espectadores, quienes disfrutan del espectáculo al sonar de las bandas de músicos, mientras miran como en el ruedo un indeterminado número de aficionados están listos para lidiar 40 bravos toros de diferentes ganaderías.
Las Corralejas también significan la tradición cultural y folclórica más importante del departamento de Sucre.
El 20 de enero de 1980, una tribuna se derrumbó en Sincelejo, Colombia, durante una corraleja. Cuatrocientas personas murieron al instante.
Texto por Iván Bernal Marín
Los palcos que formaban una gradería de tres pisos se derrumbaron de repente. Unos 30 metros de tablones se vinieron abajo. Cayeron encima de la gente. La aplastaron. Los toros se quedaron quietos en la arena, paralizados, viendo la caída del castillo de naipes más sanguinario de la historia de Colombia.
Pasó hace 39 años, el 20 de enero de 1980. Los sobrevivientes y familiares de las víctimas coinciden en describirlo así, como un “castillo de naipes”. El recuerdo permanece fresco en la memoria de los sincelejanos.
Murieron 400 al instante. Hubo más de 2.000 heridos con contusiones, piernas y brazos quebrados. La tragedia partió en dos la historia de Sincelejo y la “fiesta brava”.
Cada 20 de enero se celebraba en esta ciudad del caribe colombiano la corraleja (corrida de toros) más grande del país. 40 toros, uno por uno, salían al ruedo. Los llamados manteros los enfrentaban con capote y con muleta. Cerca de 20.000 personas disfrutaban el espectáculo. Trompetas, flautas, trombones y redoblantes ponían la banda sonora.
“Jamás se me ha olvidado lo que vivimos”, dice Denis Contreras. Entonces, era una niña de siete años. La ciudad estaba llena de visitantes de pueblos vecinos. Ella vivía al frente de la Cruz Roja, a donde llegaron muchos heridos. Algunos caminando, porque no había carros para transportarlos.
El que más me traumó fue un señor gordo, moreno, baja estatura, cejas pobladas, pelo indio, que llegó con un listón de madera que lo atravesaba de un lado a otro en el pecho. Era ayudado por dos personas atrás y otras tres adelante. Lo ayudaban a cargar el listón. No sé ni cómo llegó. Su paso era lento y se le cortaba el aire.
Al hombre no lo podían meter por la puerta, porque el listón lo impedía. Pálido, bañado en sangre, gritaba mientras serruchaban la tabla. Murió antes de que lograran cortarla, según recuerda la sincelejana Denis, quien ahora es periodista y editora de un periódico regional.
Las corralejas son una versión más rústica y popular de las corridas clásicas. Una interpretación criolla de una herencia colonial. No gira en torno a un torero como tal, sino que la protagonizan muchos osados que saltan al redondel para enfrentar al animal a cambio de unos pesos.
Otros lo hacen para probar su valentía ante sus amigos, con el alcohol como combustible. La fiesta pervive y se extiende por toda la región, a pesar de polémicas e intentos gubernamentales por atajarlas.
Las reses llegaron a América importadas por los españoles en el siglo XVI, según los historiadores. La práctica de la ganadería se extendió por las sabanas de Bolívar, Córdoba y Sucre. Y de su mano también arribaron las corridas.
El legendario circo romano conserva así su reflejo en los pueblos caribeños. El hombre que mira a los ojos a la muerte, el enfrentamiento del hombre con el toro como prueba de su casta, se sigue poniendo en escena en un teatro de palos, movible e informal, levantado por temporadas.
Fiestas parroquiales en conmemoración de santos. Con toros criollos, no de lidia. Pero igual o más bravos.
La de Sincelejo era la más importante en la sabana vieja. En 1980, la corraleja constaba de más de 9.000 metros cuadrados en la plaza de toros Hermógenes Cumplido.
“Fue como si hubiera un bombardeo”, recuerda el abogado e historiador Inis Amador Paternina. El hombre, hoy de 63 años, fue en ese entonces miembro de la organización de la corraleja, vicepresidente de la fiesta en ese año.
Un primo suyo murió aplastado.
La corrida se celebraba en un redondel “inmenso”, de unos 350 metros de diámetro.
Se hacía toreo a la usanza tradicional, a la usanza criolla, en un esquema que viene desde la colonia. Con manteros, toreros, jinetes, banderilleros, bandas de música.
Pero ese 20 de enero no había sol en la arena. Una nube negra cubría el cielo. “Había caído un aguacero de padre y señor mío”. Llovió por más de dos horas. El público ubicado en las graderías se acumuló atrás, buscando refugio bajo los techos. Los palos sostenedores de atrás se debilitaron mucho. No soportaron. Eran las 3 de la tarde.
Un pueblo que había vivido una tradición de repente vio desbordados sus sentimientos con un siniestro, algo aberrante. Fue muy difícil de manejar, sobre todo para una población con servicios de salud limitados.
Recuerda Amador.
Los hospitales de poblaciones cercanas se atiborraron. Corozal, Tolú, San Pués, Cartagena. La emergencia sobrepasó la capacidad de atención. “No había cabida para una tragedia tan grande”. Incluso se reportaron accidentes de ambulancias en su intento de trasladar pacientes. Una cayó a un pozo con cuatro en Majagual.
Los sepelios fueron masivos.
Los parientes de las víctimas se reencuentran cada año para esta fecha en el Cementerio Central.
En 1988, el Consejo de Estado condenó al municipio y a la Nación. Sincelejo debe, todavía hoy, unos $2.280 millones por indemnizaciones a las familias.
Todavía no se terminan de recoger los naipes del castillo.
Desde hace seis años la corraleja dejó de celebrarse en la ciudad. Pero por “cuestiones de apasionamientos políticos”, no por la tragedia, aclara el historiador Inis Amador. “La gente la extraña y la añora bastante”.
Texto por Iván Bernal Marín
Video de la caída del entablado de las corralejas en Sincelejo 1980
Belt and Road Initiative. Imagen extraída de Wikipedia
Estados Unidos: el país que envejece. China: la juventud que renace. Es claro que mientras en uno la prioridad es lo militar, en el otro es lo comercial.
Pese a todas las universidades, unidades investigativas, de inteligencia, contraespionaje y desarrollos tecnológicos del U2 o de las bombas nucleares, nadie en Estados Unidos, puede decir con contundencia cual fue la razón que llevó a que la Unión Soviética callera finalmente a inicios de los 90, tras 80 años de resistencia.
Pero es muy importante acercarse a algunas hipótesis que podrían ayudar a explicar el fenómeno de su decadencia.
Una de las claves está en el presidente Dwight Eisenhower, quien como militar no pudo evitar sentir la admiración, combinada con el horror que le producía la rapidez con que las tropas alemanas se desplazaban por la imponente infraestructura de la que gozaba el país en los años 40.
Con esta idea en la cabeza, pero con nuevos enemigos, decide realizar la gran empresa estadounidense de infraestructura de los años 50. Durante años el presupuesto para infraestructura nacional estaba en los niveles de entre el 10 y 12% anual.
Fue la época de oro de las grandes obras, especialmente en lo que se refiere a las de transporte. Las del agua ya habían empezado su época dorada hacia los años 30. Pero esto no sólo es importante en términos militares (desplazamiento de tropas y armamento por el territorio nacional), sino por la lucha permanente con contrincantes cuyas armas se diversifican.
Eisenhower habla con hombres del 502º Regimiento de Infantería de Paracaidistas. Imagen extraída de Wikipedia
La misma Unión Soviética es un buen ejemplo: no cayó por el arsenal militar, y más bien su caída habría que verla desde el punto de vista de lo social, lo industrial y lo cultural. De tal suerte, hoy Estados Unidos goza de una imponente infraestructura que, sólo en carreteras, llega a los seis millones y medio de kilómetros construidos.
Fue una labor de pocos años que les garantizaría su hegemonía en el corto y largo plazo. Pero el panorama hoy en el país del norte es bien distinto por el simple, muy simple embate del tiempo.
De los 614.387 puentes que tiene, 4 de cada 10 ya tienen más de 50 años. Más de 200.000 puentes que son viejos y tienen averías severas, de los cuales más de 57.000 requieren reparos urgentes y reemplazos que ya no se pueden curar con cáscara de huevo.
Su agua potable está en la misma situación, con una cifra que ronda los 240.000 tubos averiados y rotos anualmente, el 24% de las escuelas públicas están en mal estado. Desde hace muchos años Estados Unidos sólo invierte entre un 2 y 3% de su presupuesto anual.
Trump, con su tono peculiar, ha anunciado un poderoso plan en el que piensa invertir 1,5 billones de dólares (1,5 trillion Dollars) para la recuperación de infraestructuras cuyos niveles de inversión son cada vez peores desde los años 80.
Puente Manhattan en construcción en Nueva York. Imagen extraída de Flickr
Sin embargo es un plan poco realista, sin mucha ilustración sobre los mecanismos para conseguir recursos, pues, según el documento, el estado sólo invertiría 200.000 millones, mientras que los restantes 1,3 billones deberán salir de los gobiernos locales.
Llama la atención que no se trate de recursos nuevos, sino de fondos de otros programas estatales a los que debe pellizcar por un lado y por el otro para sacar la suma, pero sobre todo, que el pellizco no se sienta en el rubro militar, que sigue superando los 600.000 millones de dólares anuales, pese al reclamo de Trump de haber “gastado estúpidamente” 7 billones de dólares en medio oriente.
A otro lado del pacífico, China, que lo hace lento pero contundente, desde el año 2009 ha decidido invertir un promedio del 12% anual de su PIB, pese a que éste no goza de los rimbombantes 19 billones de dólares del PIB norteamericano.
Amén de lo anterior, su gasto anual en infraestructura supera el de Estados Unidos y la Unión Europea juntos, con miras al proyecto global de “Nueva ruta de la seda” que requiere más de 8 billones de Dólares.
Es decir, en el año 2009, China ya invertía en un año lo que a finales del 2018 Trump va a anunciar como un gasto histórico en los próximos 4 años: 1,5 billones de Dólares.
Centro de Beijing, China. Imagen extraída de PxHere
En otras palabras, China, que ha crecido de manera más o menos constante con un PIB del 8% desde la debacle financiera del 2008 en los países capitalistas, tiene el mismo gasto anual en infraestructura que el aumento de su PIB.
China ya ha inaugurado esta nueva ruta, la que aún es experimental y está en fase de consolidación.
Son más de 12.500 kilómetros férreos que unen al país asiático con Inglaterra, por solo hablar de la ruta norte. Ya ha consolidado relaciones con Alemania, hoy por hoy uno de sus mayores socios comerciales con un total de 990.000 millones de yuanes al año, y falta esperar la ruta marítima de la seda que establecerá contactos con África hasta América Latina.
Será algo cuyos efectos apenas empezaremos a sentir después de 5 años. Sobre todo, con las estimaciones del FMI que estipula que la economía mundial crecerá en los próximos 20 años entre un 3 y 4%, lo que requerirá, al mismo tiempo, una inversión de entre 4 y 6 billones de dólares anuales en inversiones de infraestructura, de las cuales más del 70% le corresponderá a los países emergentes.
Esa es la clave de la ruta de la seda del sur, que pasa por África y América, y de la cual se tendrá el tiempo de hablar en su debido momento.
Ello explica que los tiempos de esta ruta son menos inmediatos. China sacará lo que pueda de la vieja Europa, pero su mira en el horizonte está en los países emergentes.
Belt and Road Initiative. Imagen extraída de Wikipedia
Mientras tanto, la Unión Europea alarga cada vez más los pantalones, se desmarca de EEUU, como lo ha demostrado últimamente abriendo canales comerciales con Irán a través de transacciones que no pasan por el dólar, y América Latina ve absorto al presidente Trump gritando como padre borracho que todo lo hace mal sin dar alternativas para hacerlo mejor.
En ese contexto, los países emergentes estamos en la misma situación de las bellas doncellas cuyo amor es disputado entre el viejo incompetente, poderoso y malgeniado, y el joven gallardo, tímido pero romántico que lo da todo por ella.
Tendremos que tomar una decisión.
Sobresale entonces que mientras EEUU parece un saltimbanqui echando candeladas por sacar 1,5 billones en los próximos 4 años (es decir, poco más del 6% anual de su PIB) de los cuáles apenas tiene certeza de 200.000, mientras no toca el presupuesto militar de sus 600.000 millones anuales de defensa, China alcance los 230.000 millones en gasto militar anual, mientras sigue firme en los 1,5 billones anuales, que son cuenta aparte de los proyectos de compromiso con La ruta de la seda, que ya empieza a rendir sus primeros frutos.
Es claro que mientras en uno la prioridad es lo militar, en el otro es lo comercial, lo que recuerda la primera etapa de la época victoriana, cuando el príncipe Alberto de Sajonia estaba convencido del papel fundamental de las rutas comerciales en el dominio mundial de Inglaterra.
Era un hombre de otro tiempo, y entendía, como hoy sucede, que las potencias consolidan su poder por el dominio de las rutas, y las rutas no se dominan por la fuerza militar, sino por las inversiones que abren nuevos caminos, acercan nuevos horizontes y crean nuevas relaciones.
Prácticamente en cada cuadra hay un local dedicado al deporte favorito de los cochabambinos: el de ejercitar la mandíbula a toda hora, con o sin motivo. Entramos a un lugar familiar, donde aparte de saborear un magnífico café acompañado de un sonso, me alimenté de esas pequeñas cosas que hacen grande al pasado: recuerdos de una época que la forjaron nuestros viejos, nuestros abuelos.
Una tarde de esas en la que el aburrimiento hacía mella en nosotros, decidimos ir a comer a cualquier sitio de nuestra gastronómica ciudad.
Es sorprendente lo mucho que ha crecido la urbe en torno a la comida, llenándose de boliches (no de lujosos restaurantes) temáticos donde nunca falta un menú característico. A la oferta de platillos tradicionales, se han sumado recetas de otros países, antes desconocidas por estos lares, como las arepas venezolanas, las barbacoas americanas, los sushis japoneses, los kebabs turcos, etc.
Si hasta los veganos y aficionados a la “gastronomía molecular” tienen sus sitiales, un día de estos vamos a despertar con que perros y gatos habían tenido sus merenderos favoritos.
Prácticamente en cada cuadra hay un local dedicado al deporte favorito de los cochabambinos: el de ejercitar la mandíbula a toda hora, con o sin motivo. De hecho, hay avenidas donde se suceden churrasquerías, pizzerías, pollos fritos y hamburgueserías, y entre sus escasos huecos prosperan, curiosamente, algunas farmacias.
Cartel restaurante Abuelita Ruth. Foto por José Crespo
Sin rumbo definido, en el camino se nos ocurriría caer en alguna confitería, un salón de té o algo parecido.
Insólitamente, a mi octogenaria tía se le antojó helado y eso que el clima no daba para tal cosa, pues horas antes había llovido y el frío con sus humedades aconsejaba un manjar caliente. Yo deseaba a toda costa un café bien cargado, a la manera antigua, medio turco y bien tinto, no estaba para finuras del tipo capuccinos, espressos y no sé qué otras vainas que hoy se destilan, perdón, se estilan.
Caímos en un sitio familiar, a medio camino entre una repostería y una cafetería, decorado sin ínfulas de nada. Se respiraba paz entre sus muebles con aires avejentados y totalmente inconexos, ni una mesa o taza se parecía a la otra. Objetos que parecían rescatados de una venta de garaje o de un mercado de pulgas. Mobiliario que fácilmente en otra parte estaría destinado al depósito de las cosas antiguas e inservibles.
Bicicleta y pie de manzana. Foto por José Crespo
Aquí tenía una función válida y de lo más entrañable: traernos el pasado al presente para palparlo con la mirada, detenerse en cada detalle y, por qué no, respirarlo como si de verdad lo hubiéramos vivido las nuevas generaciones.
Aparte de saborear un magnífico café acompañado de un sonso (pastel, a ser posible humeante, de yuca con queso) con resabios de toque oriental, me alimenté de esas pequeñas cosas que hacen grande al pasado: recuerdos de una época que la forjaron nuestros viejos, nuestros abuelos. Y que por iniciativa de unos espíritus generosos, esos objetos y trastos cotidianos que los habían acompañado, recobraban vigor ante nuestros ojos.
Sonso y café, una deliciosa combinación en todo momento. Foto por José Crespo
Por un momento creí escuchar una añeja canción marcada por la aguja que recorría sus pistas.
Antes de la invasión del plástico y de todos sus males.
Tocacintas y radio. Foto por José Crespo
P.S. Menos mal que el pasado se puede todavíapaladear por la vía musical. Si es en versión vinilo, la sensación resulta impagable.