domingo, junio 29, 2025
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El programa que interpreta a los que quieren “Ver arder el Mundo”. Propuesta de Gobierno de Gustavo Petro.

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Los punteros, según las encuestas Iván Duque y Gustavo Petro, no cuentan con un programa de gobierno en lo que estrictamente puede denominarse como tal.


 

El caso del documento presentado por Gustavo Petro como el Programa de Gobierno de la Colombia Humana, es un ejercicio retórico, casi literario, en el que no se encuentra una sola cifra. Ningún diagnóstico, el cual parece absolverse en el señalamiento de situaciones totalmente subjetivas al no estar acompañadas de ningún dato o documento de soporte. De esta manera, las reflexiones sectoriales que presenta se acompañan de sentencias como estas:

 

  • En Colombia la atención a la primera infancia, la educación de calidad, la ciencia y la cultura hoy son privilegios. Durante las últimas décadas los gobiernos aumentaron la matrícula de la educación básica en las ciudades, pero los recursos destinados a construir una sociedad del conocimiento incluyente y una paz generacional fueron priorizados para financiar la guerra.
  • La economía productiva y el mejoramiento en la calidad de la educación tienen como presupuesto fundamental el fortalecimiento de la ciencia y la tecnología.
  • El conocimiento global, nacional y local se vinculará a través de redes activas, productivas y de libre acceso. Se articularán las universidades nacionales e internacionales con el saber popular y los interrogantes científicos relevantes serán formulados con la participación activa de los territorios urbanos y rurales y entre el sector productivo y la sociedad en general. La investigación será avanzada y en ella participarán, de manera innovadora, solidaria y colaborativa, todos los actores sociales. Creatividad, rigor y capacidades de innovación llevarán a ampliar notablemente los grupos de investigación, el número de patentes y publicaciones científicas y en general los productos de conocimiento de primer nivel con sello colombiano y reconocimiento global.
  • En nuestro gobierno la salud será pública, gratuita, preventiva y para todas y todos sin ninguna discriminación, guiados por la ley estatutaria de salud, que resultó de un consenso entre los distintos actores del sector, en el que hay que avanzar.
  • El financiamiento se seguirá obteniendo mediante impuestos y aportes parafiscales a nivel nacional y territorial en una tendencia a aumentar el presupuesto general a través del control de la evasión y la elusión, aumentando el empleo y la formalización laboral y buscando que el gasto público en salud no sea inferior al 80% del gasto total en el sector (Sector Salud).
  • se pondrá en marcha un modelo de salud integral que priorice la promoción y la prevención y que mejore la atención y la rehabilitación con enfoque de derechos humanos, intercultural y diferencial. De este modo se busca superar las inequidades de género, diversidad sexual, etnia, región, urbano- rural, situación, condición y ciclo vital.
  • La apuesta de los últimos años por un modelo extractivista aumentó la fragilidad de la economía colombiana, agravada por la caída de los precios internacionales del petróleo y el cambio en el uso de energías. A esto se suma las inequidades entre actividades productivas del campo, el creciente proceso de potrerización, monocultivos y deforestación, además de la concentración de la tierra que ha estado siempre en el centro del conflicto interno.
  • Conducir el país hacia una era de paz implica un tipo de economía que permita que la población colombiana goce de un buen vivir a partir de los ingresos de su trabajo. La única riqueza válida es aquella que nace del trabajo; el dinero fácil ha hecho que nuestro país sea consumido por la corrupción y la violencia. Por eso nuestro gobierno, en el marco de la transformación del modelo económico, la redistribución de la tierra y la vinculación de las ciudadanías al saber, las redes y la tecnología, adoptará medidas para generar y mantener trabajo decente con condiciones dignas de remuneración, estabilidad, seguridad social y calidad de vida tanto a nivel urbano como rural.
  • El gobierno de la Colombia Humana asumirá la transición y la recomposición de la economía mediante el fortalecimiento de la agricultura, la reindustrialización en sectores estratégicos, el incremento de la inversión ambiental y en ciencia y tecnología, para estimular cambios tecnológicos y la gestión de la biodiversidad, todos ellos como factores de dinamización económica.
  • Enfrentar los desafíos del cambio climático constituye uno de los grandes retos de nuestro país y del mundo en los próximos años, que implica trasformaciones profundas en el modelo económico y no solo mejores políticas ambientales: uno de los principales cambios consiste en la disminución del uso de energías fósiles.

 

Foto extraída de: Pulzo

 

  • El carbón que se extrae es destinado a la exportación y los ingresos fiscales que ella genera no tienen ninguna proporcionalidad respecto a sus efectos sociales y ambientales.
  • Hay que detener el aumento de la frontera agrícola, impulsando el desarrollo productivo de las zonas planas y de sabana con vocación agrícola, para frenar la deforestación, uno de los principales problemas ambientales que enfrenta el país.
  • El agua es quien nos gobierna y no nosotros a ella: debemos cuidarla. El agua es vida, es un derecho fundamental y un bien común de la humanidad.
  • Colombia Humana se propone avanzar hacia una justicia climática que restablezca los desequilibrios sociales y económicos, que promueva la eliminación de la segregación y que reduzca las vulnerabilidades de los territorios mediante la generación de capacidades de los entes territoriales, los sectores económicos y las comunidades.
  • La segregación socioeconómica en el espacio se presenta en las ciudades y en todas las regiones del país. Es necesario mejorar las condiciones de convergencia, en términos de calidad de vida, entre los centros urbanos más dinámicos y aquellos donde se concentra la pobreza.
  • Una sociedad que permite la protesta es una sociedad que respeta la diversidad y el carácter pluralista de la ciudadanía. Nuestro gobierno garantizará el ejercicio del derecho a la protesta, al igual que derechos asociados, tales como los derechos a la asociación, a la reunión y a la libertad de expresión.
  • Adoptaremos medidas para que la ciudadanía acceda expeditamente al sistema judicial. Garantizaremos a la población el acceso a los mecanismos de protección de los derechos fundamentales consagrados por la Constitución Política. Haremos un mayor énfasis en la ética aplicada al ejercicio del derecho, tanto en la formación académica como en el control del desempeño profesional: lo legal debe identificarse con lo ético.
  • Nos comprometemos con la consolidación de una paz que trascienda a muchas generaciones en el futuro, con la convivencia y con la seguridad en todo el territorio nacional. Trabajaremos para que el pueblo colombiano goce de Seguridad Humana, es decir que la gente disfrute de las libertades individuales y colectivas y a la vez reduzca los miedos e incertidumbres que la desigualdad social impone.
  • En nuestro gobierno terminarán la mentira y la impunidad frente a la violencia de más de cincuenta años. Las víctimas y la sociedad colombiana conocerán la verdad y tendrán la garantía de que se aplicará justicia efectiva y pronta contra los victimarios.
  • Para impedir que el miedo y la desconfianza sigan inmovilizando al pueblo colombiano y perpetuando en el poder a quienes por siglos nos han dominado, debemos limpiar la política de la corrupción. La política debe dejar de ser un negocio en que los corruptos invierten para ganar poder a costa de la necesidad del pueblo. La política debe ser el ejercicio del poder de la ciudadanía, debe ser el vehículo para que la gente pueda satisfacer sus necesidades colectivas.

 

 

Foto extraída de: El Heraldo

 

  • La relación entre el gobierno y la oposición no dependerá de la repartición de cuotas burocráticas o cupos indicativos, ni de prácticas clientelistas; por el contrario, se orientará a la búsqueda colectiva, amplia, participativa y argumentada de soluciones reales a las problemáticas del país y a las demandas colectivas de la ciudadanía.
  • Cuidaremos el voto ciudadano como expresión de la voluntad popular y como tesoro de la democracia. Impulsaremos una reforma que garantice que el sistema electoral sea autónomo e independiente de las ramas del poder estatal. De esta manera evitaremos la influencia negativa de los partidos políticos mayoritarios, oficialistas o con abundantes recursos económicos en la conformación y en el quehacer del Consejo Nacional Electoral.
  • Los órganos de control no pueden actuar bajo la influencia de los poderes ejecutivo y legislativo, pues esto impide que ejerzan su función o hace que actúen de manera parcializada, convirtiéndose en víctimas de la politización y cómplices de la corrupción. El propósito de los órganos de control no debe consistir por ningún motivo en ejercer persecución política ni en entorpecer la función pública, sino en favorecer que esta sea transparente.
  • La lucha contra la discriminación y la segregación social de un país pasa por reconocer la diversidad de sus ciudadanías y así poder implementar políticas afirmativas que, con la voz de todas y todos, garanticen la inclusión social y la participación efectiva.
  • En Colombia Humana, los y las jóvenes serán protagonistas de la esperanza, para lo cual de manera participativa se construirán las condiciones que permitan su desarrollo pleno alrededor de la educación, la cultura, el deporte, el trabajo y políticas inclusivas para aquellos en condiciones de exclusión y vulneración de derechos.
  • Considerar la armonía y el equilibrio con la Madre Tierra como el principio del modelo económico y de desarrollo a implementarse en el país, en el cual el agua es una de las prioridades para la conservación y debe ser el eje de participación de los pueblos y comunidades étnicas que han cuidado los territorios.
  • La Colombia Humana tendrá una política internacional orientada hacia el multilateralismo y la diversificación de las relaciones internacionales con las distintas regiones del mundo, especialmente con los países y sociedades de América Latina y el Caribe. Se actuará con absoluto reconocimiento de la autodeterminación de los Estados y sus pueblos, la solidaridad y la cooperación con todos los países.
  • El gasto público será transparente, ordenado y sin sobrecostos, solo así se podrán superar los tradicionales niveles de ejecución del presupuesto colombiano. Con transparencia y sin sobrecostos, nos mantendremos en el horizonte de la regla fiscal.
  • Fortaleceremos la descentralización administrativa y política de los territorios colombianos, para ello garantizaremos que los ingresos tributarios departamentales y municipales no se trasladen a la Nación.

 

Por supuesto estas frases son un resumen de lo que se afirma como verdades que deben ser aceptadas sin que ellas se sustenten en ningún contexto, análisis, norma, estadística o estudio.  Nada que conduzca a darle validez, acompaña a las sentencias enunciadas a lo largo del texto, lo cual pone en duda la idea de su veracidad y por lo tanto su confiabilidad.

 

Foto extraída de: Las2orillas

 

La mayoría de estas proposiciones son abiertas, genéricas, sin ningún tipo de compromiso o parámetro que permita plantear posteriormente una verificación en el cumplimiento de lo así planteado. Otras, las menos, están estructuradas en términos de lo que se propone hacer, y muy poco en relación a cuánto se espera alcanzar aplicando lo contemplado en cada sector, ni del punto de partida del cual arrancaría su posible ejecución.

Así las cosas, todos los planteamientos se convierten en un ejercicio discursivo en el que se promete una especie de retorno al paraíso perdido: del amor, la fraternidad, la convivencia pacífica, o el desarrollo de las potencias del ser humano (algo muy característico de los filósofos del romanticismo alemán, recordar a Friedrich Schelling). El otro aspecto que refuerza esta sensación es una restauración de la relación armónica con el medio ambiente, con los saberes ancestrales, una posición profundamente neo romántica. Esta no consulta la viabilidad de llevar sus postulados a la práctica, y se niega a entender que la sola presencia del hombre en el ambiente es  “intervencionista” y, por tanto, lo deseable sería prevenir o mitigar los efectos de la habitabilidad del territorio y la transformación productiva.

Leyendo las treinta páginas que constituyen el  PDF del programa de gobierno de la Colombia Humana (disponible para descarga en su página web), vienen a mi mente dos imágenes:

 

1-La de unos folletos que repartían hace muchos años los pastores evangélicos o los testigos de Jehová (no lo recuerdo exactamente), en donde convivían armónicamente en una pradera leones y cebras, tigres y búfalos, lobos y corderos. El único enemigo de esa armonía era el pecado, la renuencia a seguir los mandamientos de Dios. En todo caso, esa evocación vino a mi mente porque en este documento programático también hay un enemigo que no está identificado muy directamente, pero no por ello menos presente a lo largo de todos los planteamientos: el sector privado, la gran empresa, la economía extractivista, el sector de la gran construcción, las EPS (Entidades Promotoras de Salud privadas), los fondos privados de pensiones, entre otros.

2-La del filósofo criollo Antonio Cervantes, más conocido como Kid Pambelé. Las reflexiones que habitan esta política de la Colombia Humana son deseables en el mismo sentido que lo es lo que alguna vez afirmó este gran pensador: “Es mejor ser rico que pobre”. Argumento en que parecen inscribirse la cantidad de promesas sobre armonía, redistribución, realización del ser humano, y equidad en la prestación de servicios (agua, saneamiento, energía, vivienda, educación, salud, cultura, justicia, etc.) de acceso público, gratuito y de cobertura universal. Todo esto suena muy bien decirlo, pero el problema surge cuando por ningún lado se menciona desde donde se está arrancando (diagnóstico), ni a donde se quiere llegar (metas cuantificables), y, sobre todo, por medio de qué acciones se llegará a lo planteado. Suponiendo que el beneficio alcanzado por la población objetivo después de la implementación de lo propuesto (indicadores de impacto) sea incontrovertible, al igual que la sentencia de Pambelé.

 

Después de reflexionar sobre la magnitud de lo que esta campaña promete, podría llegar a sentir lástima por el candidato que se ha metido en este berenjenal. Pero este impulso a la compasión se esfuma en mí velozmente, y es superado por la certeza de que a esta osadía de prometer lo divino y lo humano no se asocia la autocrítica.

Y es que, por definición, el caudillo no puede ser autocrítico. En tanto la duda (esa fiel y salvadora amiga) penetre en el castillo de ideas preconcebidas, erigido por el mesías para sostener su utopía, todo se derrumba. El caudillismo tiene por rasgo característico la ausencia de un sentido crítico de los propios postulados (la crítica, muy mordaz y razonada, está reservada para la acción de los demás actores o grupos socio políticos en contienda); y de ello da buena cuenta la historia de la humanidad. Pero, si remitirse a la historia resultara engorroso o aburrido, recomiendo recurrir a la literatura como auxilio para precaverse contra estos males: por favor lean (o vuelvan a leer) El Otoño del Patriarca.

Finalmente, propongo una separación de lo enunciado, a partir de lo que considero tres categorías que son posibles de establecer en este documento.

La primera trata de las propuestas que tienen alguna concreción (en términos de cuantificar la promesa o de definir claramente cómo llevarla a cabo), aunque sea incompleta. A estas llamaré GRUPO 1. (Ver al final de esta nota)

El GRUPO 2  (Ver al final de esta nota) está compuesto por aquellas afirmaciones abiertas, manifestación de una buena intención que no alcanza a ser una propuesta estrictamente hablando.

 

Foto extraída de: Periodicoamarillo

 

Y el GRUPO 3 (Ver al final de esta nota), estará conformado por las afirmaciones cuya característica es entrar en contradicción con otras realizadas en el mismo documento, ser a todas luces completamente inviables, o encarnar un peligro para el orden establecido (soberanía del Estado, derecho a la propiedad, populismo, libre empresa, comercio internacional, etc.).

Adicionalmente, en un pdf aparte (de 15 páginas), se puede leer un documento con la propuesta ambiental. Esta tiene un poco más de diagnóstico, algunas cifras que dan cuenta de la situación actual, y está más detallada (en relación a lo que de ella se extractó para hacer parte del programa general) en lo que puede considerarse una propuesta concreta en términos ambientales. Contiene propuestas muy complejas de implementar, en su propósito de cambiar totalmente el panorama energético del país, sumado a que no se dan datos ciertos de cómo hacerlo:

 

-¿Cuánto costaría la propuesta integral que propone?

-¿Cuántos son los hogares susceptibles de cambiar las fuentes de suministro de energía a través de paneles solares?

-¿Cuánto cuesta cambiar todos los vehículos de transporte urbano a buses eléctricos? (Tampoco se dice si serían todos los buses, o solo los de los sistemas de transporte masivo).

-No especifica en cuánto tiempo se daría la transición propuesta para Ecopetrol en función de dejar de ser la entidad del Estado que hoy explota las reservas de hidrocarburos, para volverse (a partir de un proceso de investigación) en la agencia nacional de energías limpias.

-No cuantifica los efectos fiscales de dar terminación unilateral de los contratos que hoy tienen las empresas que hacen minería o explotación de las reservas de hidrocarburos en el país.

-No identifica lo que significa en costos y disminución de producción de energía eléctrica el cambio del modelo de represas y megacentrales a la producción de energía a partir de pequeñas centrales hidroeléctricas.

 

Foto extraída de: Eluniversal.

 

Y así, podría seguir señalando que, como en general en estos planteamientos de gobierno, no se va más allá de formular enunciados, los mismos que se corresponden bien con las preocupaciones del electorado (sobre todo el más joven o el académico, ausentes de los intereses empresariales):

 

-Defensa del medio ambiente.

-Rescate de las tradiciones etno-culturales.

-Lucha contra los grandes conglomerados económicos (que los electores identifican mecánicamente con actos de corrupción).

-Impulso al agro y consolidación de una propuesta de seguridad alimentaria. (incluyendo el custodio de semillas en clara oposición a las empresas multinacionales que comercializan insumos agrícolas).

-Protección social ampliando la financiación del estado hasta alcanzar la gratitud y cobertura universal en diversos servicios (agua potable, alcantarillado, educación, salud, pensiones), entre otras.

 

Petro le habla con especial eficacia a aquellos que están desengañados del sistema, porque, a su juicio, no han recibido de él sino bofetones, aunque sean personas que han alcanzado la edad adulta y un nivel educativo superior al de sus padres y abuelos, por ejemplo, a partir de los servicios sociales que ese mismo sistema, aunque de manera profundamente imperfecta, les ha entregado a lo largo de sus vidas.

Pensar esta situación me recuerda la frase de un amigo cercano, Petrista por demás, que dice: “Hay hombres a los que solo les interesa ver arder el mundo”.

Esta frase puede resumir de buena forma la actitud del electorado de Petro: con tal de ver arder el sistema que encuentran lleno de fallas y completamente ajeno a sus ideales, aquel que señalan de sus frustraciones o dificultades, y que claramente consideran como inviable, no se toman el tiempo de reflexionar (a pesar de que muchos seguidores de este candidato tienen una amplia formación académica) sobre la viabilidad de implementar el discurso que este les propone.  Solo se suman a la horda incendiaria, sin pensar si en la conflagración terminarán quemando su propia casa.

Para concluir, no me gustó este programa. No me parece que se pueda votar por un candidato que promete cambiar el mundo y no se toma el más mínimo trabajo en decir cómo logrará tal proeza. Su propuesta me parece retórica, vacía, y peligrosa, porque estoy segura que si lo intenta (cambiar el establecimiento) algo avanzará en su pretensión. Y ese avance, por poco que sea, se convertirá en nuestra perdición: perderemos todo lo poco que hemos podido obtener en términos del sistema capitalista (que, gústenos o no es el sistema en el que vivimos, nosotros y el mundo entero), y quedaremos a la mitad, mirando los destrozos, y sin alcanzar mínimamente lo que se presenta como el mundo perfecto.

 

Foto extraída de: Pulzo

 

En ese orden de ideas, recuerdo una reflexión que me ha acompañado desde hace tiempo. Leyendo la historia de Colombia, específicamente en el libro sobre Bolívar de Indalecio Liévano Aguirre, aparece la frustración de la concesión de la navegabilidad por el río Magdalena, en tiempos del nacimiento de la incipiente nación colombiana, y esto me da la medida de lo costoso que nos ha sido alcanzar los pocos avances que hemos logrado en términos de insertarnos en la economía global, y alcanzar mínimas condiciones de desarrollo. La imagen del vapor de Elbers, encallado en los sedimentos del gran río, es la estampa más elocuente del riesgo que se asume cuando se pretende ser innovador, reformar el mundo existente, y no se cuenta con el sustento suficiente para intentarlo razonablemente.

Por lo tanto, espero que Gustavo Petro no pase a segunda vuelta. Petro y Duque son dos opciones electorales que se refuerzan mutuamente, mi ilusión es que desactivada la una se desinfle automáticamente la otra.

 

Foto extraída: Gacetanautica

 

Los dejo entonces, a aquellos que estén interesados en profundizar un poco más, en compañía de estas tres categorías propuestas, cuyos postulados seleccionados han sido tomados textualmente del documento original.

 


Grupos


Grupo 1.

Grupo 2 

Grupo 3

4 restaurantes de comida italiana en Pereira que debes visitar. ¡Te mostramos la ruta!

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 La Cebra que Habla visitó cada lugar y la impresión fue mayor porque en verdad cada restaurante sobrepasó nuestras expectativas. Así que Bienvenidos y acá le contamos cuáles son esos lugares, qué ofrecen y cómo llegar. Empecemos


 

Decía el escritor George Bernard Shaw que “No hay amor más sincero que el que sentimos hacia la comida“. Y en parte tiene razón, porque la comida es ese manjar que nos permitimos todos los días para sobrevivir y sin ella, no podríamos vivir. Así de simple es este amor. Sin embargo, también hay otra comida, la de fin de semana, si es que puede llamarse así. Esa que cuando salimos solos, o con la familia es para satisfacer esos gustitos personales y/o para impresionar.

Partiendo de eso, aquí si hay que hablar con sinceridad, como dice Shaw, porque la ciudad de Pereira es un niño que se creció, y de esta manera, económicamente hablando, el catálogo de restaurantes a la carta se amplió considerablemente. Así es que podemos encontrar en la ciudad desde comida regional, (paisa, valluna, tolimense, pastusa) hasta comida de otros países y continentes (argentina, uruguaya, peruana, vietnamita, china, alemana).

Sin más, en esta ocasión les presentamos cuatro restaurantes de comida italiana que pueden considerar a la hora de una salida de “fin de semana” o si prefiere, en cualquier día u ocasión. Personalmente, La Cebra que Habla visitó cada lugar y la impresión fue mayor porque en verdad cada restaurante sobrepasó nuestras expectativas. Así que Bienvenidos y acá le contamos cuáles son esos lugares, qué ofrecen y cómo llegar. Empecemos.

 

Casa Napoli

¿Cómo llegar?
Dirección: Calle 14 Nº 6-29

Casa Napoli está emplazado a media cuadra del Parque La Libertad en el centro de Pereira. Es un local de comida italiana que huele a oregano desde lejos, un olor característico de la alta cocina del país de la bota. En esencia es un lugar pequeño pero bellamente decorado con replicas de cuadros de Claude Monet, mesas y sillas rústicas con manteles de picnic y con la puerta de la cocina abierta donde se puede casi que apreciar al cheff cantando el Figaro’s Aria del Barbero de Sevilla. Allí, en este restaurante, hay una atención inmediata y personalizada, y la especialidad de la casa es Spaguettis al Mejillón, el  Spaguetti Matriciana, y el Spaguetti Dulce Vita,  por supuesto, entre otros platos más.

El lugar está abierto desde las 5:00 p.m hasta las 10:00 p.m

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Villa Italia

¿Cómo llegar? y ¿dónde encontrarlo?

Dirección: Calle 19 Nº 4-20

Red Social:@villaitaliaristorantepizzeria

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Villa Italia es toda una experiencia culinaria. Si de comida italiana se trata, este lugar ofrece platos para chuparse los dedos y no dejará un paladar indiferente. A eso hay que sumarle que poseen buenos vinos nacionales e importados de sabor joven y añejo. La atención es de primera, y la iluminación y aseo del lugar simplemente es 10/10. El único detalle es que la zona adolece de parqueaderos, pero por lo demás ir un fin de semana, solo, o en pareja, será una aventura gastronómica. Ofrecen pasta larga y pasta corta, ensaladas frescas, y gran variedad de quesos para complementar los platos.

El lugar está abierto desde las 10:30 a.m hasta las 9:00 p.m

 

 

Spaguetti House

¿Cómo llegar? y ¿dónde encontrarlo?

Dirección: Calle 22 Nº 5-28

Red Social: @SpaghettiHousePereira

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Spaguetti House sorprende por varias cosas: primero, que es un lugar sencillo por fuera, pero al ingresar es un local extremadamente espacioso. Segundo, que la decoración le hace justicia al nombre del negocio, porque es, literalmente, una casa de espagueti, con toda su variedad y con el mobiliario preciso que te hace sentir como en casa. Un par de jóvenes carismáticas atienden con solicitud, y este es el espíritu que lo impregna todo, ya que su dueño Julian Torres, también lo es.  Quizá por eso el establecimiento conserva un toque Vintage en su decoración, además del curioso empapelado de la barra y otros lugares, a base de recortes de revistas italianas. Spaguetti House recibe grupos de máximo 12 personas y su menú es muy variado y creativo. Entre las  bebidas promocionadas está la cerveza artesanal Poleka Kasue, desde las heladas cimas de la cordillera central.

El lugar está abierto desde las 12:00 p.m hasta las 9:00 p.m

 

Da Giorgio

¿Cómo llegar? y ¿dónde encontrarlo?

Dirección: Calle 24 Nº 9-48

Red Social: @giopran66

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Da Giorgio es 100% italiano. Desde la puerta, donde tienen una bandera de Italia, hasta la pizza de berenjena, y la especialidad de la casa: “Pizza Cuadrada”, que le da un toque único al lugar. El slogan del negocio no podía ser más sugerente: “La mejor pizza de la ciudad“. Y no es para menos, porque el dueño es 100% italiano, amante de los viajes y de la alta cocina, se trata de Giorgio Prandelli, que llegó a Pereira y se enamoró de ella, aunque antes, lo enamoró una pereirana, con quien está casado actualmente. Da Giorgio es un local pequeño, igual que el mencionado Casa Napoli, pero todos caben donde hay buen queso, vino, tomates y pasta. La atención es de primera y los sabores simplemente inigualables.  Un lugar que sin duda, vale el gusto visitarlo.

El lugar está abierto desde las 12:00 p.m hasta las 9:00 p.m

 

Bonito, comida del sur del continente en Pereira

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Este año Bonito presentará su propia carta, donde el sabor y la autenticidad en cada receta será una cita obligada de hedonismo culinario.


 

Información del lugar: Dirección, Horario y Atención al público

Lugar: Bonito

¿Qué es?: Restaurante

¿Dónde es?: calle 19 6-48 C.C. Alcides Arevalo L.201 Pereira

¿Cuándo?: De  lunes a sábado de 8am – 4 pm.

¿Por qué ir?: Es una oferta de cocina creativa y tradicional, donde se mezcla la cocina de la abuela con referentes exóticos de comida latinoamericana.

Sugerido: ají de gallina peruana. Un plato exquisito que se compone de pollo desmechado con pimentón amarillo, queso parmesano, almendras, galletas de soda y cebolla.

 

Bonito, es un restaurante que ofrece una mixtura de comida tradicional y experimental, donde los detalles hacen la diferencia. Hace seis años surgió este sólido proyecto de la mano de Juan Manuel Álvarez y Mauricio Gómez. El lugar ofrece opciones para todos los gustos, sabores y colores con un toque especial y auténtico en cada plato. Juan Manuel Álvarez Londoño es uno de los socios del restaurante y siempre ha sido un apasionado de la cocina por influencia de su papá y su señora abuela.

Mi papá siempre cocinaba donde la abuela. Y también ella siempre hacía unos tamales y preparaba cocina tradicional con un sabor increíble.

Él empezó estudiando psicología en la Universidad Católica de Pereira, pero se inclinó más por la gastronomía, así que estudió en el S.E.N.A Cocina y Gastronomía.

 

Fotografía: Stefanny Rodríguez

 

Recuerdo un profesor muy chévere que se llamaba don Noé Franco. Allí conocí mucha gente talentosa. Cuando terminé empecé a trabajar en restaurantes para conocer la dinámica del negocio. Empecé en Sushi, el primer restaurante de comida japonesa en Pereira, y en ese momento me dediqué plenamente a la cocina. Después de un año decidí explorar nuevos territorios, así que emprendí un viaje que me llevó hasta al sur argentino.

Juan Manuel  recorrió la cordillera desde Ecuador, pasando por Perú, bajando por Bolivia hasta la Pampa Argentina.

La comida peruana es excelente, toda la comida de mar es muy interesante en su preparación y exquisita en sus sabores.  Y ya Argentina fue el lugar donde aprendí el arte de los asados.

 

Fotografía: Stefanny Rodríguez

 

En Argentina Juan Manuel vivió una temporada, donde cursó varios Talleres de Cocina Molecular, Administración de Restaurantes y Nutrición.

 

***

Mauricio Gómez Ossa estudió Administración de Empresas en Bogotá. Su contacto con la gastronomía fue en  el primer trabajo que consiguió después de salir de la universidad. Especificamente desde la logística en un restaurante bastante  exclusivo ubicado en la zona rosa de Bogotá llamado KEA, ahí conocí  ese mundo  de la cocina, la organización, el mercadeo y la logística.

Viajé un tiempo y me quedé una temporada en Costa Rica, donde trabajé en un restaurante muy grande, y ahí si pude empaparme más del tema. Era un restaurante que estaba ubicado en la segunda playa más grande de Centroamérica, donde se organizaban muchos eventos. Trabajé ahí con la logística, además más cercano a la cocina.

 

 

Así es que Bonito es un proyecto que no sólo emerge de lo empresarial o lo culinario, sino de una profunda amistad, que se ha cruzado por varios tiempo, territorios y experiencias.

Nosotros (Mauricio y Juan Manuel) viajamos juntos a Argentina. Después nos volvimos a encontrar en Perú donde tuvimos un grupo de música, y siempre cocinábamos, y hasta después de varios años, nos volvimos a reencontrar en Pereira, donde surge Bonito, un proyecto que ya habíamos vislumbrado desde Argentina, pero que hasta ese momento no había sido posible.

Después de varios años en la distancia, Juan Manuel y Mauricio coincidieron en Colombia, y desde ahí, ese proyecto que alguna vez fue charla de bares, se materializó en acción, local y propuesta culinaria en la ciudad de Pereira.

 

Fotografía: Stefanny Rodríguez

 

Cuando Juanma regresó, un día me escribió y me dijo “estoy en Pereira” y pues yo en Bogotá, entonces me dijo que ya estaba organizando lo del restaurante, que, si lo hacíamos, y empezamos de una.

Cuando esta idea nació ambos habían estado muchos años desvinculados con la cultura culinaria y en general a la vida en Pereira, sin embargo, emprendieron este proyecto con toda la energía y fortaleza, y después de seis años el negocio se mantiene y cada día crece más.

El proyecto empezó desde cero, hacer cotizaciones, mirar locales, hasta que un día bajando el en el ascensor de en el centro comercial de Alcides Arévalo, le pregunté a Marga la gerente si el local era muy costoso, y así fue como dimos con este sitio.

 

Fotografía: Stefanny Rodríguez

 

Cuando Bonito empezó su propuesta culinaria era cocina experimental, donde los acompañantes típicos como el arroz, los frijoles, entre otros, se reemplazaban por otros  acompañantes, sin embargo, los propios clientes empezaron a pedirnos los frijoles que hacíamos solo una vez a la semana o el arroz, entonces descubrimos potenciales que teníamos, que nos hace diferentes a la competencia.

Este modelo de negocio propone un menú diverso, donde los detalles son imprescindibles, por ejemplo,  su arroz está sazonado al estilo de la abuela, las tajadas pueden ser a la vainilla o a la naranja, así que cada plato de Bonito, siempre tendrá un toque propio, auténtico que les identifica de los demás.

Desde que empezamos hemos tenido un público fiel, hemos implementado distintas iniciativas como la tarjeta de cliente, una tarjeta que se compone de 10 almuerzos, el décimo Bonito invita. Nos damos cuenta que la rotación de la gente es bastante, sin embargo, hay personas que vienen casi todos los días.

 

Fotografía: Stefanny Rodríguez

 

Bonito además de ofrecer diversos menús en sus instalaciones, también brinda servicios de cáterin y refrigerios, todo a domicilio. Además, Juan Manuel ofrece talleres de diversas cocinas: peruana, argentina y colombiana.

En este magnifico restaurante nunca se repite un menú, ya que cada día ofrece variedad para todos los gustos. Los acompañantes estrellas son: arroz y frijoles, pero siempre se pueden elegir tres tipos de carnes, dos tipos de crema, tortas de zanahoria o ahuyama, siempre hay una carne especial, además de ensalada, vinagreta o el chimichurri propio de la casa.

Uno de tantos platos estrella en Bonito son el pollo Teriyaki; el estofado de Cerdo a la cerveza; el ají de gallina peruana; crema de zanahoria con ralladura de naranja.

 

Fotografía: Stefanny Rodríguez

 

Los desayunos también tienen su plato estrella: el omelette, además de sándwich y el pan tostado que seduce en las mañanas.

Este año Bonito presentará su propia carta, donde el sabor y la autenticidad en cada receta será una cita obligada de hedonismo culinario.

Camposanto, un libro como memoria para no olvidar

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En ocasiones, al leer esta novela corta, es inevitable no recordar al médico insepulto en el pueblo de Macondo en la novela colombiana La Hojarasca


 

 

Información Bibliográfica del libro
 

Título: Camposanto

Autor:  Marcela Villegas

Editorial: Sílaba Editores. Medellín.

Colección: Trazos y Sílabas

Género: Novela Corta

Año: 2018

Pág. 132

 

Hay palabras difíciles de superar y más cuando aún sintiéndonos recogidos, percibimos que lo dicho es suficiente, que en esencia significa lo concreto, conciso y contundente. Esto puede pasar con un discurso de interés, una columna de opinión en el periódico, la frase de una figura intelectual o en este caso, el resumen en el reverso de un libro cuyo título tiene exactamente diez letras.

Esa palabra en concreto es Camposanto (2018), la reciente novela de Sílaba Editores de Medellín,  cuyo contenido, lleno de desdichas, no es, a decir de Guido Tamayo el reseñista del tomo, un falso patetismo.  Es  esta la primera novela de la escritora “emergente” Marcela Villegas, oriunda del departamento de Caldas, quien durante su paso por la maestría en Escritura Creativa de la Universidad Nacional, la escribió sin más y después (como era lógico y de esperarse debido a su calidad y estilo) fue galardonada con el Premio Nacional de Novela corta entregado por la Universidad Javeriana en el 2016.

Así es que mantener las cosas completas podría ser “mantener los cabales”, ordenar nuestras cosas o ser consecuentes con nuestros actos, sin embargo, para Villegas este orden, se deriva de un gran poema de Mark Strand escrito en 1968 que sin pasar desapercibido en su libro, refleja una realidad política polarizada en un país como Colombia.

 

Foto: Diego Val.

 

“En un campo

soy la ausencia

del campo…”

 

Ausencia, igual o parecida a la del campesino cuando abandona sus tierras por la violencia; o el joven (aún con sueños) es asesinado en los mal llamados “Falsos Positivos” ; o la comunidad que es desalojada a causa de la violencia comercial de una  empresa minera multinacional. La escritura de esta caldense es buena en eso, tanto que parece no querer olvidar (no hacernos olvidar) nada de nuestra historia, específicamente aquello de las exhumaciones de los cadáveres provenientes de un conflicto violento durante los conocidos periodos de 1948 al 1958.

Ahí también, según su temática, está consignada la historias cruda de la enfermedad de Alzhéimer que padece su madre, lo que parece suscitar la pregunta, ¿será que se puede olvidar muriendo constantemente?

 

“Siempre es así.

En donde esté

soy lo que falta…”

 

 

Foto: Diego Val.

 

Amalia, la protagonista en esta obra, no para de excavar, abrir fosas. Es su profesión.  Su trabajo como antropóloga forense la llevo a casarse con la muerte. Un trabajo que le puede entregar una memoria viva a las familias de esos muertos, pero que como paradoja, claro, porque contrario a ese noble resultado de su trabajo, ella sufre la perdida de la memoria de su madre, quien la va hundiendo lentamente, sumiéndola en el olvido. Olvido que en esencia es una muerte lenta, ingrata.

Con esta magistral narración, no hay que suponer que el olvido en Colombia es una alegoría dentro de ese duro contexto social y político de los tiempos de la Colombia conservadora vs liberal. No, eso sería negar la profundidad misma de una realidad que a todos nos atañe. En ocasiones, al leer esta novela corta, es inevitable no recordar al médico insepulto en el pueblo de Macondo en la novela colombiana La Hojarasca; la permanente aproximación del tren; y las desdichas de los muertos en el universo del escritor Gabriel García Márquez.

Por lo anterior también cabe destacar que los diálogos que usa Marcela Villegas, no distan mucho del manejo zigzagueante que complementa las voces de sus personajes en Amalia y Elena. Estilo que permite recordar la escritura de Gabo.

 

Foto: Diego Val.

 

 “Cuando camino

Parto el aire

Y siempre

El aire viene

A llenar los espacios

En que mi cuerpo ha estado…”

 

Ahora si, en concreto, es posible que esta técnica literaria, heredada desde una perspectiva cinematográfica, concebida en el guion como parte fundamental de la narración, le permite a Marcela Villegas en su obra “Camposanto” (Sílaba Editores) filtrarse fácilmente por los pensamientos del lector que genéricamente hablando, desembocan en la muerte y reavivan el sarcasmo de la escritura.

 

“Todos tenemos razones

para movernos.

 Yo me muevo

para mantener las cosas completas”.

 

Foto: Diego Val.

Los intelectuales, la violencia y el poder. El caso de Jorge Gaitán Durán (1924-1962)

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El caso del poeta Jorge Gaitán Durán llama la atención en la historia social de la literatura porque fue uno de los hombres de mediados del siglo XX que hizo del ejercicio de escritor una profesión.


Por: Carlos Builes

Texto publicado originalmente en: Analecta Política de la Universidad Pontificia Bolivariana

 

Introducción

La historia social de la literatura en Colombia es otra forma de interpretar los acontecimientos históricos a partir la mirada del mundo de la literatura y las artes. Así mismo, es una hermenéutica de los escritores no sólo desde sus obras sino como parte de un contexto social, económico y cultural de un país. Las relaciones literatura y nación pasan por la construcción misma de la identidad colombiana. Es por eso que, cuando se pregunta por la función social de los intelectuales, se está indagando por el ejercicio mismo de lo político. El poder simbólico del lenguaje ha sido utilizado por la religión y el Estado como formas de comunicación y dominación. Detrás de la palabra se esconde la red social del deseo y el poder.

Los escritores, poetas, artistas, actores y directores de teatro y cine colombianos de la década de los años cincuenta por un sin número de condiciones históricas se encontraron y conformaron relaciones de confrontación y de amistad que llegaron a producir un escenario estético profesional como no lo había visto la primera parte del siglo veinte. Todas aquellas duras circuntancias políticas, sociales y económicas que miles de hombres y mujeres sufrieron en las fratricidas guerras llamadas “Época de la violencia” fue el carbón que encendió el espíritu creativo de muchos artistas e intelectuales que llamado por su responsabilidad social quisieron iluminar e interpretar desde lo estético aquellos trágicos años.

Visto de esta manera es necesario afirmar que la dicotomía ética estética que generaciones anteriores de escritores habían practicado en Colombia fue conjurada por estos intelectuales de los años cincuenta y que para el caso de este artículo resalta la figura dominante en lo cultural y literario del poeta Jorge Gaitán Durán. Su corta, pero intensiva vida fue casi integramente dedicada a descubrir el alma colombiana y a conectarla con el mundo. El concepto de intelectual total o profesional puede ser aplicado sin lugar a dudas a la obra y vida de este intelectual que entendió su postura y función como la forma de marcar a sus compatriotas y a las instituciones culturales y políticas de la época.

 

El espacio social nacional

La década de los cincuenta en Colombia fue un espacio social marcado por las contradicciones entre un país católico, rural y semifeudal que se abría paso lentamente hacia la segunda fase de industrialización, esto es, a la tecnificación de la producción del café y de la caña de azúcar, la explotación del petróleo, el hierro y el acero. Así como a la consolidación de los grandes centros textileros en los nuevos centros urbanos, que eran diseñados con metodologías de planeación económica y urbana, venidas en particular de Estados Unidos y Francia. Sin embargo, aquellos vientos de modernidad industrial no se acompañaron de modernidad política.

Más de 200.000 colombianos muertos en el conflicto hicieron de aquella década el espacio de una guerra fratricida que había sido declarada en tribunas y púlpitos por los partidos liberal y conservador que, en nombre de Dios y de la patria, escribieron una de las páginas más sangrientas de la historia colombiana. De esta forma, se cambiaron las relaciones de compadrazgo y vecindad por una cacería de brujas que más recordaba la época de la Inquisición que los buenos augurios que la modernidad económica proclamaba en la mitad del siglo XX colombiano.

Un gobierno de corte falangista español, el de Laureano Gómez (1950-1953), una dictadura impuesta con la ayuda de los partidos, la del General Gustavo Rojas Pinilla y una alianza bipartidista: el Frente Nacional, pactado entre los mismos partidos políticos que habían hecho la guerra civil, llamada “época de la violencia” (Guzmán, Fals & Umaña, 2010, p. 464). Su primer presidente fue Alberto Lleras Camargo (1958-1962), miembro del grupo literario “Los Nuevos”. En el campo social había una pobreza generalizada, con una tasa de analfabetismo superior a la mitad de la población, una incipiente pero activa clase obrera, vigilada y controlada por los órganos policiales, así como una miserable infraestructura vial1 que mantenía aisladas las regiones entre sí y que impedía la consolidación de un mercado de bienes y capitales.

De acuerdo con Vejarano (2008), Las vías de comunicación eran en extremo deficientes. La mayoría no estaban pavimentadas, las carreteras existentes entre las principales ciudades eran estrechas, llenas de huecos y casi intransitables en invierno. Las fuertes pendientes, las curvas de radio y la baja resistencia de la mayoría de los puentes dificultaban su uso por parte de camiones pesados, con lo cual el transporte de productos se hacía extremadamente tortuoso e ineficiente. (p. 44) El campo cultural era una prolongación del campo social y político colombiano y respondía a las condiciones históricas del tiempo. Una élite política y cultural bien educada, normalmente en el exterior. París como centro cultural y literario por excelencia; Londres y Estados Unidos como los centros económicos y tecnológicos; España como inspiración de un proyecto político, el de un falangismo a la colombiana; y para un pequeño grupo de intelectuales simpatizantes del realismo social estaban: México, Cuba y Buenos Aires, que hacían de bisagras culturales entre las vanguardias europeas y las tendencias latinoamericanas.

 

Las condiciones del éxito de Gaitán Durán

Jorge Gaitán Durán nació en 1924 en Pamplona, una pequeña ciudad colonial con gran prestigio histórico, político y cultural. En su fundación fue un puente entre la empresa libertadora colombiana y venezolana. Muchos artistas e intelectuales de la época se movían entre estos dos países gracias a las becas y ayudas estatales que Venezuela ofrecía a estudiantes colombianos. Era hijo del ingeniero Emilio Gaitán Martín, quien trabajó en la construcción del ferrocarril de Cúcuta y de Delia Durán Durán, hija del general Justo L. Durán, de una familia de políticos liberales y propietarios de tierras en el departamento del Norte de Santander (Aleixandre et al., 1990, pp. 263-275).

La primera formación de Gaitán la pasó en Cúcuta, ciudad fronteriza a la que estaría unido durante toda su vida. Cúcuta era la ciudad en la que su familia tenía sus negocios y fue entre Cúcuta y Pamplona donde conoció a su amigo y fiel compañero de Mito, Eduardo Cote Lamus. De Pamplona era originario también su gran amigo, el pintor Eduardo Ramírez Villamizar, personaje que en la plástica sería el pionero en la abstracción geométrica en Colombia. Años más tarde, ambos viajaron a Bogotá para realizar estudios universitarios.

Gaitán estudió primero ingeniería, como su padre, en la Universidad Nacional de Colombia, pero un año más tarde se retiró para comenzar derecho en la Pontificia Universidad Javeriana, la de los jesuitas, una de las más prestigiosas de la época. Allí entabló amistades que más tarde harían parte de su proyecto cultural, entre ellas la del P. Jaime Vélez, el filósofo más relevante de la época.

 

La búsqueda de la creación como profesión (las relaciones entre obra y campo), 1944-1950

Su viaje a Bogotá era el paso obligado de quienes aspiraban a una mejor formación, pero, igualmente, de aquellos que tenían ambiciones económicas y políticas. El estudio del derecho le aportó los elementos jurídicos y políticos que más tarde serían fundamentales para interpretar y cuestionar la situación nacional, así como los instrumentos legales para moverse en el mundo de empresarios y negocios de la cultura.

Gracias a su capital económico familiar, Gaitán podía permitirse una vida burguesa y bohemia; además, podía comprarse las novedades de libros extranjeros de la época que eran distribuidos por la Librería francesa y por la famosa Librería Buchholz, cuyo dueño, Karl Buchholz, había creado alrededor de su librería una tertulia literaria entre los intelectuales y escritores de la época. Entre sus lecturas se encontraba las obras de Marx, Marcuse, Bataille, Valéry, así como una afición natural hacia las artes y el cine.

Lecturas e influencias disímiles que determinaron su entrada al campo literario nacional a través de sus primeros escritos. La Escuela Normal Superior, creada en el gobierno liberal de López Pumarejo en 1936 tuvo un papel preponderante en la consolidación de “las condiciones para la formación de los primeros educadores de pensamiento crítico, además de inaugurar la enseñanza mixta en Colombia” (Sarmiento, 2006, pp. 304-305). Durante la guerra civil española arribaron a Colombia hombres de letras y artes.

En los años de la postguerra europea, llegaron de Alemania Fritz Karsen (director del Instituto Karl Marx de Berlín); de Francia, Paul Rivet (fundador del Museo del Hombre en París y creador en Colombia del Instituto Etnológico); y de España, Francisco Cirre (literato), Manuel Ussano (médico) y Francisco Veera (matemático), entre otros. La Escuela sería cerrada por el presidente Laureano Gómez, el alfil franquista en América Latina.

La necesidad por convertirse en un escritor y un hombre de cultura lo llevó a trabajar en el periódico El Tiempo (1947-1949), como comentarista y crítico de arte y cine . El Tiempo era un periódico de la familia Santos (parientes del actual presidente de la República, Juan Manuel Santos) y el hegemónico de la época. Años más tarde trabajaría en el periódico El Espectador (1959-1962) de la familia Cano, que organizaba una tertulia literaria vanguardista con representantes de la oposición franquista. Fue allí donde él conoció a Eduardo Zalamea Borda4 subdirector de EL Espectador y a Gabriel García Márquez, quienes hacían parte del Grupo de Barranquilla.

Todos ellos, entre 1948 y 1951, hicieron parte de la revista cultural Crítica fundada por Jorge Zalamea Borda, quien “extenderá esa voluntad de Los Nuevos de conectar la literatura colombiana con las corrientes del más diverso origen en la búsqueda de una voz polifónica y universal” (Sarmiento, 2006, p. 286). Crítica se anticipó a Mito en la divulgación de las tendencias de vanguardia europea y norteamericana entre el público culto y de vanguardia de la época (Gilard, 2005, pp. 13-58). En medio de aquel ambiente cultural, Gaitán Durán publicó en 1946 (tenía 22 años) su primer libro de poesía: Insistencia en la tristeza, dedicado a Hernando Téllez y a Eduardo Carranza.

Y en 1947 publicó: Presencia del hombre, en el que dedicó su primer poema a Jorge Rojas, uno de los fundadores del grupo Cielo y Piedra . En Bogotá, Gaitán Durán era también un empresario de la cultura. El mundo de los negocios estuvo cercano a él, quien tenía la audacia de entrelazar el mundo cultural con el editorial y el político. Eso explica por qué tan tempranas sus publicaciones. Aquella red empresarial, de influencias culturales y políticas alrededor de periódicos, tertulias literarias, amistades con representantes tradicionales de la cultura, así como con los vanguardistas, le permitieron posicionarse como poeta, escritor, crítico de cine y arte. Entre tanto, la situación política y social ardía en Colombia.

En 1946 lllegó a la presidencia Mariano Ospina Pérez, empresario conservador que había derrotado a los dos candidatos liberales Jorge Eliécer Gaitán y Gabriel Turbay. Era el final de 16 años de reformas sociales y liberales en lo cultural que promovían la separación Estado-Iglesia y una educación laica. Se intentó promover una cierta modernización secular en el país. Fue durante los años 1946 y 1958 cuando el fenómeno de la llamada “Violencia” se agudizó.

Hubo entonces una extraña fusión de criminales pagados (Los Pájaros, entre otros), policía conservadora (Chulavitas) y guerrilleros liberales (Chusma) que, con el uso de los medios más sanguinarios, provocaron miles de pérdidas humanas y materiales, especialmente en el campo colombiano. Las causas de dicha confrontación partidista tenían origen ideológico y moral contra comunistas, masones, ateos y sindicalistas, pero la causa de fondo remitía a la lucha por tierras y regiones estratégicas como las zonas azucareras, cafeteras, ganaderas, centros mineros y petroleros del país. Las migraciones hacia las ciudades provocadas por la nueva industrialización y por la expropiación de tierras por causa de la violencia, generaron un frente campesino y obrero de relativa fuerza política en Bogotá que se encontraba representado por Jorge Eliécer Gaitán, quien en 1948 pudo aglutinar las tendencias liberales alrededor de su nombre como candidato presidencial.

El 9 de abril de 1948 Jorge Eliécer Gaitán fue asesinado. Como consecuencia del asesinato del líder popular, el pueblo en masa salió a protestar por las calles de Bogotá y de otras ciudades. Su asesinato fue el punto de quiebre institucional más determinante de mediados del siglo XX . Jorge Gaitán Durán, liberal como su madre, lector atento del marxismo, el mismo día de la muerte del caudillo, como era llamado Jorge Eliécer Gaitán, hizo parte de la toma de la emisora Nacional de Colombia. El burgués liberal y provincial se había convertido, por unos instantes, en el agitador social que intentaba orientar las revueltas populares en contra del gobierno conservador. Todo aquello finalizó en el caos y la anarquía y dejó centenares de muertos y a Bogotá semi destruida.

En 1949 surge un nuevo grupo de poetas denominado Los Cuadernícolas en el que aparecen Gaitán Durán, Fernando Charry Lara y Álvaro Mutis, entre otros. Hernando Téllez comentaba en El Tiempo ese mismo año: “estos poetas creen que la revolución poética se halla en las palabras… son esclavos del mito de la novedad y los obsesiona, ante todo, la originalidad de la forma” (Sarmiento, 2006, p. 259). De esta primera etapa de la trayectoria de Gaitán se puede deducir que _–por las condiciones familiares: herencia económica y política de su familia, reforzada con una educación en colegios privados y universidades de prestigio, así como el deseo personal de salir de la provincia hacia la capital para continuar sus estudios– quería continuar y mejorar su herencia económica y cultural familiar por el deseo de ser un intelectual profesional.

La acumulación de nuevo capital simbólico en Europa, Asia y América Latina (su diario de viajes) En mayo de 1950 Gaitán, emprendió un largo viaje por Europa, la Unión Soviética y China. Fue un viaje provocado, en parte, por las condiciones políticas colombianas del momento, pues él estaba siendo investigado por el Estado colombiano debido a los hechos antes anotados del Bogotazo. Pero aquel viaje también estaba motivado por el deseo personal de conocer el mundo y de acumular capital cultural que le permitiera asumir una postura como intelectual. Su holgada posición económica familiar le posibilitó vivir desde 1950 hasta 1953 en París, como centro de sus viajes.

Los viajes: la poesía como expresión del mundo La reconstrucción de sus viajes se puede hacer desde diferentes prismas interpretativos. Primero, a través de sus Diarios (Gaitán, 1975), que fueron escritos en forma cronológica, pero cuyos textos no son historias de relatos, sino textos poéticos que dejan entrever sus experiencias, no como un reportero cultural (Ryszard Kapuscinski), sino como poeta. Otra fuente de reconstrucción de aquellos viajes son las cartas que escribió a sus amigos (E. Cote Lamus, Hernando Valencia Goelkel, Hernando Téllez y Caballero Bonald) en donde aparecen elementos y comentarios sobre las dificultades y aventuras que vivió, así como de sus futuros proyectos. Otra fuente de información de sus viajes se encuentra en los comentarios y artículos que él mismo escribió en la revista Mito años más tarde.

En París asistió a cursos de cine en el Instituto de Altos Estudios Cinematográficos (Idhec) y cursos de filosofía con Maurice Merleau-Ponty en el Colegio de Francia. La ciudad de París de los años cincuenta era el centro cultural más relevante en la república mundial de las letras . Allí se nutrió de las nuevas tendencias estéticas y políticas alrededor de Sartre, Simone de Beauvoir, Merleau-Ponty y Camus, entre otros.

Les Temps Modernes, así como las principales revistas literarias y culturales de la época: Critique, Esprit, La Nouvelle Revue Française y la Nouvelle Critique lo inspirarían en el proyecto de fundar una revista de vanguardias en Colombia. También conoció las tendencias del cine y del teatro, en particular a través de la figura de Bertolt Brecht, quien vivía en París por aquellos años. Leía y compraba libros que estaban de moda y descubrió poetas de otras culturas que pudo dar a conocer más tarde en Colombia, como el poeta turco Nazim Hikmet . Pero París no sólo fue la fuente de inspiración cultural, también su alimento pasional.

Fue allí donde conoció a Dina Miscovici (seudónimo Hannah), una artista brasileña, con quien tuvo una hija. Durante los años 1950 y 1951 viajó por Europa, incluida una parte del Este. En Varsovia descubrió que un pueblo, cuando reconstruye su ciudad, se constituye a sí mismo. Esa primera experiencia con Polonia fue un momento de constatación positivo entre las teorías marxistas que leyó en Colombia y el proyecto soviético en la práctica. Después recorrió los clásicos centros culturales europeos y escribió relatos poéticos de artistas, de pinturas y de monumentos que le impactaron. Estuvo en Venecia, Florencia y Roma; en Bruselas y Brujas; en Rotterdam y Amsterdam; y en Basilea, en Suiza. En septiembre de 1952 emprendió un largo y apasionante viaje por Rusia y la China.

Esta parte de sus Diarios son relatos de experiencias y reflexiones de la vida cotidiana de rusos y chinos. Cuenta también sus visitas a teatros, museos, bibliotecas y parques de Moscú. Establece comparaciones con la gran literatura rusa, el comunismo estalinista y los sufrimientos de los rusos para sobrevivir. Le impresionaban las largas filas que la gente tenía que hacer para abastecerse de comestibles y para recibir los artículos de primera necesidad. Y en un comentario que él mismo hace, cuando la revista Mito le publica parte de sus Diarios, se distancia de una posible militancia comunista: Estas notas fueron escritas hace cuatro años, a medida que transcurría mi viaje por la Unión Soviética y China… Ojalá sirvan a lo menos de respuesta a los reaccionarios que me llaman comunista y a los comunistas que me llaman reaccionario.

Apenas son el testimonio, probablemente ineficaz, de un hombre que pretende ser libre. (Gaitán, 1975, p. 42) Pasó por Moscú, Novosibirsk, Irkutsk, Ulan Bator, el Desierto de Gobi y Pekín, donde descubrió la magnificencia de la China imperial y los polvorientos suburbios de la ciudad. Su viaje por China lo hizo acompañado del libro de Richard Wilhem, Histoire de la Civilization Chinoise. Es alrededor de la cosmovisión china que intenta leer todo aquello que estaba viviendo.

Aquella relación intrínseca tan particular que hacía la tradición antigua china entre la filosofía, la magia y la religión; y las compara con la escisión filosófica que el pensamiento occidental hace de ellas para construir su ego. La naturaleza en el mundo chino, a diferencia del hinduismo, tenía un papel destacado, y esto lo podía observar y contemplar en los templos taoístas o en sus danzas yen y en sus rituales, pero sobre todo, en su organización estética y orgánica. Y agregaba: “¡Qué diferencia con la manifestación monstruosa, inhumana, presencia apenas de la presencia en bruto, que vi el año pasado en Berlín Oriental!” (Gaitán, 1975, p. 256).

Aquel viaje a Berlín Oriental no aparece registrado en sus diarios, solo la nota anterior. Visita también la Muralla China y el pequeño caserío de Tientzun, que analizó de forma detalla, pues quería comprender cómo aquel poblado primitivo pasó de ser un feudo de terratenientes a una región próspera y moderna de campesinos con tierra que, a través de cooperativas, lograba vender sus mercancías y elevar su poder de adquisición para incrementar la industrialización del país.

Y comentaba Gaitán: “Tal aumento de la producción es la clave del porvenir de China, y por eso la Reforma Agraria no es solamente la pieza básica de los planes del Gobierno Popular, sino todo el contenido de la revolución democrática de tipo nuevo” (p. 260). La acumulación simbólica de capital cultural que él adquiría en sus viajes fue perfilando su proyecto como intelectual y su función social en Colombia. En 1959, ocho años después, escribirá su ensayo cumbre La revolución invisible, apuntes sobre la crisis y el desarrollo de Colombia. En enero de 1953 volvió a Francia a Bagneux, un pueblo cerca de París, donde vivía con su esposa e hija.

Fue el momento de reflexiones, comparaciones, análisis en torno al comunismo, a la industrialización basada en el conocimiento, al humanismo en contra del mecanicismo. Una síntesis de sus viajes y una confrontación con las teorías que había leído. El terror de la conformidad burguesa, pero el de la burocracia de la dictadura del proletariado, lo cuestionaba. Aquellos viajes lo hicieron vivir y sufrir una contradicción consigo mismo, con su posición burguesa y con todo lo que creía. Y fue más intensa cuando, desde París, descubrió la doble moral de los países democráticos: “Se habla insistentemente del proceso contra los alemanes a Oradour.

Este crimen se repite en Colombia desde hace siete años (1946). La diferencia reside en que nuestros innumerables campesinos asesinados no han inquietado a la atareada conciencia occidental” (Gaitán, 1975, p. 27). Todas estas meditaciones intelectuales y vivencias en sus viajes, terminaron con una lacónica frase: “Para los intelectuales, la Revolución comienza después de la Revolución” (Gaitán, 1975, p. 277). En mayo de 1953 visitó España. Viajó por Castilla, pensando en su poeta tan cercano, Antonio Machado. En Madrid lo impresionó mucho El Greco.

Hizo un detallado relato de su encuentro con Vicente Aleixandre (Gaitán, 1975), una de las figuras de más peso literario en la España de los años cincuenta y con quien mantuvo una amistad intelectual hasta su muerte. Visitó El Escorial, Ávila y a su regreso a Madrid donde se reunió con sus amigos colombianos en el Colegio Mayor de Guadalupe: Eduardo Cote Lamus, Rafael Gutiérrez Girardot  y Hernando Valencia Goelkel. Allí hizo amistades con los latinoamericanos: Luis Cardoza y Aragón, Ernesto Mejía Sánchez y Ernesto Cardenal, entre otros.

Conoció a José Manuel Caballero Bonald y por medio de él y sus amigos colombianos entró en contacto con el campo literario de la Madrid de la época a los hermanos Goytisolo y a Jorge Guillén, entre otros. Y entró en contacto con el mundo editorial catalán por medio de Barral y Janes. Era la época de Camilo José Cela, del franquismo y del Opus Dei en su expansión hacia América Latina y del reintegro de España a la ONU. París fue la inspiración de toda su empresa pero fue es en Madrid donde se proyectó al mundo hispanoamericano. Su gira europea concluyó en el año 1954 en Londres con la visita a su amigo colombiano Pedro Gómez Valderrama (1923- 1992).

Más tarde sería director de Mito y Ministro de Educación en el Gobierno de Alberto Lleras Camargo. De regreso a América Latina pasó por Brasil porque allí vivía la familia de su esposa Dina y en Rio de Janeiro permanecieron dos meses. Es probable que allí haya establecido contactos con el escritor brasileño Carlos Drummond de Andrade quien fuera parte del comité patrocinador de Mito un año después.

 

Conclusión

El caso del poeta Jorge Gaitán Durán llama la atención en la historia social de la literatura porque fue uno de los hombres de mediados del siglo XX que hizo del ejercicio de escritor una profesión. Hubo otros tan grandes como él pero sólo él mantuvo la libertad de su trabajo porque se desvinculó económica y políticamente de padrinos e ideologías. Gracias a su herencia económica y cultural pudo estudiar, aprender idiomas, viajar y darse una vida de intelectual burgués.

Llama la atención que, considerado como burgués, sus primeros años como comentador de cine y pintura, su obsesión fue cómo contribuir para que aquella Colombia provincial, atrasada y pobre se convirtiera en una nación competente e independiente en el concierto de las naciones. Soñó, como muchos, con la revolución, pero para él la revolución debía fraguarse en lo cultural y en las mentalidades para que tuviera fundamento.

Poeta, ensayista, crítico de cine y pintura, gestor cultural, director y fundador de la revista Mito, accionista de la impresora Antares, director de Ediciones Mito, organizador de programas radiales, del Festival Internacional de Teatro de Bogotá, de encuentros entre los intelectuales de la época, bohemio, de gran vida social, tanto el mundo de los artistas como el de los políticos lo consideraban como suyo. Militante de las izquierdas democráticas y del Movimiento Revolucionario Liberal de Alfonso López, se lanzó al ruedo político con el MRL y tuvo el sueño de crear una editorial colombiana que sirviera de mediación cultural entre pueblos iberoamericanos y los nuevos aires culturales universales.

Un intelectual que tenía el doble latido del corazón: nacional y cosmopolita, con el sueño de convocar a los mejores intelectuales de la época, sin importar sus tendencias políticas o religiosas en la transformación de su país. Si Jean Paul Sartre cumplió la función de intelectual dominante y total en la Francia de 1945 a 1980, Jorge Gaitán Durán lo fue en la década de los cincuenta en Colombia.

Información, invitación y foro sobre Mega Cable en Pereira

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Mega Cable, Mega Proyecto para todos los pereiranos


 

El Foro Mega Cable, el cual se llevará a cabo de 8:00 a.m. a 6:00 p.m. el próximo miércoles 23 de mayo, se dividirá en dos jornadas. Será un seminario, donde al final se le entregará a los asistentes un certificado por parte de la Universidad Tecnológica de Pereira y el cual tiene el objetivo de exponer las alternativas de sostenibilidad financiera de los sistemas de transporte y el uso responsable y conciente de los métodos alternativos de transporte, con el objetivo de generar en la población acciones que deriven en la responsabilidad ambiental y social. En esta jornada el itinerario es el siguiente:

 

Cronograma

8:00 a.m. Registro.
8:15 a.m.Instalación.
8:30 a.m.Juan Guillermo Ángel, Gerente Mega Cable.
8:45 a.m. Eugenio Prieto, Director  Área Metropolitana Valle de Aburrá.
9:15 a.m. Soraya Azán, Especialista Senior en Movilidad y  transporte en el Banco de  Desarrollo de América Latina, CAF.
9:45 a.m.Break.
10:00 a.m. Herman Loaiza Martínez, Gerente de la Asociación Cable Aéreo Manizales.
10:30 a.m. Viviana Castillo, Gerente General de Telecabinas Kuelap de  Chachapoyas, Perú.
11:00 a.m.Jorge Ramos, Jefe de Cables Aéreos, Metro de Medellín.
11:30 a.m. José Jhon Gálvez Mejía, Director de operaciones Megabús.
En la jornada de la tarde los asistentes podrán conocer diferentes casos de éxito, ciudades que le han apostado  a la sostenibilidad y a la responsabilidad ambiental y social.
2:00 p.m. Juan Pablo Gallo Maya, Alcalde de Pereira.
2:30 p.m. Federico Gutiérrez Zuluaga, Alcalde de Medellín.
3:00 p.m. Frederic Demoulin, Gerente POMA Colombia.
3:30 p.m.Debate.
3:50 p.m.Break.
4:10 p.m.César Dockweiler, Gerente Mi Teleférico de La Paz, Bolivia.
4:40 p.m. Alejandro Maya Martínez, Director Agencia Nacionalde Seguridad Vial.
5:10 p.m. Jorge Eduardo Rojas, Ex Ministro de Transporte, Ex Alcalde de Manizales.
5:40 p.m.  Debate

 

 

Los diez libros imprescindibles de Philip Roth

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“Hice lo mejor que pude con lo que tuve”. Con esta frase el escritor Philip Roth se despidió de la escritura en una entrevista con la revista francesa Les in Rocks:

“Se acabó. Nemesis será mi último libro”.


Texto originalmente publicado en Abc.es

 

Hoy el mundo amanece con la lamentable noticia de la muerte de Philip Roth, un gran escritor norteamericano que en algún momento del camino se retiró de la literatura con la frase: “No quiero leer ni escribir más”. La Cebra que Habla lo recuerda con esta nota sobre 10 libros imprescindibles para cualquier lector de su obra.

1- «Pastoral Americana»

Seymour Levov, modelo a seguir por todos los muchachos judíos de New Jersey, gran atleta y mejor hijo, sólido heredero de la fábrica de guantes que su padre levantó desde la nada, ha rebasado la mitad del siglo XX sin conflictos que puedan estropear su dorada Arcadia, una vida placentera que comparte con su mujer Dawn, ex Miss New Jersey, y con su hija Meredith. Y es en este preciso momento,con su vida convertida en un eterno día de Acción de Gracias en el que todo el mundo come lo mismo, se comporta de la misma manera y carece de religión, cuando el Sueco Levov verá derrumbarse estrepitosamente todo lo que le rodea.

 

Portada extraída de: La Vida Infinita.

 

2- «El Lamento de Portnoy»

El largo relato que de sus frustraciones y complejos hace el protagonista, Alexander Portnoy, durante sus sesiones de psicoanálisis. Desde su crecimiento en un típico hogar judío de clase media en la Nueva Jersey de los años cuarenta, hasta su despertar sexual y el desasosiego que le provocan sus problemáticas relaciones con las mujeres, nada escapa a su agudo análisis y amarga autocrítica. Una lúcida e irónica visión, tremendamente divertida, de las costumbres y psicología judías, y del desmoronamiento del sueño americano.

 

Portada extraída de: Todo Coleccion

3- «La Conjura Contra América»

Cuando el renombrado héroe de la aviación y fanático aislacionista Charles A. Lindbergh obtuvo una victoria aplastante sobre Franklin Roosevelt en las elecciones presidenciales de 1940, el miedo invadió todos los hogares judíos de Norteamérica. Lindbergh no sólo había culpado públicamente a los judíos de empujar al país hacia una guerra absurda con la Alemania nazi, en un discurso transmitido por radio a toda la nación, sino que, tras acceder al cargo como trigésimo tercer presidente de los Estados Unidos, negoció un «acuerdo» cordial con Adolf Hitler, cuyas conquista de Europa y virulenta política antisemita pareció aceptar sin dificultad.

 

Portada extraída de: Todo Colección

 

4- «Sale el Espectro»

Philip Roth dice adiós a su alter ego: Nathan Zuckerman. Veintiocho años después de introducir a Zuckerman en La visita al maestro, Roth le dice adiós a su célebre protagonista y alter ego. En esta novena novela, Zuckerman ya es un hombre anciano, atormentado por la pérdida de sus medios económicos y el temor de ver morir a los que le quedan. Tras once años en Massachusetts, regresa a Nueva York, donde se cruza con una nueva generación de escritores, pero también con un viejo amigo moribundo. Sale el espectro es un estudio profundo de la obsesión, del olvido, de la resignación y del deseo imposible de satisfacer.

 

Portada extraída de: Todo Colección

5- «Elegía»

En esta novela Roth desvía su atención hacia la lucha crónica de un hombre contra la mortalidad. El destino del protagonista de la novela comienza con la primera y abrumadora confrontación con la muerte en las idílicas playas de sus veranos infantiles, pasando por los problemas familiares y los logros profesionales en su edad adulta, hasta llegar a su vejez, momento en el que se siente desgarrado al comprobar el deterioro de sus contemporáneos y el suyo propio. Creativo publicitario de éxito con una agencia de publicidad en Nueva York, el protagonista es padre de dos hijos de un primer matrimonio, que lo desprecian, y de una hija de un segundo matrimonio, que lo adora, además del amado hermano de un buen hombre cuyo bienestar físico despierta en él una amarga envidia y el solitario ex marido de tres mujeres con quien ha mantenido matrimonios desastrosos. Es, por fin, alguien que acaba siendo aquello que no quería llegar a ser. Elegía hace referencia a una obra de teatro alegórica y anónima del siglo XV, un clásico del antiguo drama inglés, cuyo tema es la evocación de la vida en la muerte.

 

Portada extraída de: Todo Colección

 

6- «Goodbye Columbus»

Es el primer libro de Philip Roth. La novela corta de la que toma el título narra el idilio veraniego de dos jóvenes universitarios. Neil Klugman procede de la parte pobre de Newark, y la preciosa Brenda Patimkin, de la zona residencial. Tal vez por eso, en su apasionada aventura intervienen decisivamente la noción de clase y la desconfianza. Completan este volumen cinco relatos cuyo tono va de lo iconoclasta a lo asombrosamente tierno, y que arrojan luz sobre el conflicto entre padres e hijos, y amigos y vecinos de la diáspora judía norteamericana.

 

Portada extraída de: Mercado Libre.

7- «El animal moribundo»

David Kepesh, a sus ochenta años, confiesa a un personaje desconocido una de sus últimas experiencias sentimentales: la que mantuvo con Consuelo Castillo, una joven cubana, casi cincuenta años más joven que él. Desde que la revolución de los sesenta lo liberó de sus ataduras familiares, Kepesh, profesor universitario, famoso periodista, un hombre seductor, inteligente y culto, ha vivido al margen de cualquier compromiso. Y tiene una rica fuente para sus conquistas dentro de sus propias clases. A las puertas de la vejez, la vitalidad y la hermosura de Consuelo enfrentarán al protagonista con el significado de su vida.

 

Portada extraída de: Casa del Libro.

8- «Némesis»

En el «calor sofocante de la Newark ecuatorial» una espantosa epidemia causa estragos y amenaza con dejar a los niños de la ciudad de Nueva Jersey mutilados, paralizados o minusválidos, e incluso con matarlos. Este es el sorprendente tema de la nueva y desgarradora obra de Roth: una epidemia de polio que tiene lugar en un tiempo de guerra, el verano de 1944, y sus efectos sobre la comunidad de Newark, regida por la cohesión y los valores de la familia, y sobre sus niños. El protagonista de Némesis es Bucky Cantor, un joven de veintitrés años responsable de las actividades al aire libre de los alumnos de una escuela, lanzador de jabalina y levantador de pesas, que vive volcado en sus pupilos y frustrado por no haber podido ir a la guerra con sus coetáneos a causa de un defecto de visión.

 

Portada extraída de: Todo Colección.

9- «La Humillación»

Para Simon Axler, uno de los principales actores teatrales norteamericanos, todo ha terminado. Ya sexagenario, ha perdido su magia, su talento y la seguridad en sí mismo. Imagina que la gente se ríe de él, no puede fingir que es otra persona. Su mujer se ha ido, su público le ha abandonado, su agente no puede persuadirle de que vuelva a actuar. De repente, estalla otra trama: un deseo erótico fuera de lo corriente que sirve de consuelo a su vida desposeída, pero que es tan arriesgado y aberrante que no apunta hacia el alivio y la gratificación, sino a un final aún más sombrío y espantoso.

 

Portada extraída de: Casa del Libro.

10- «La Mancha Humana»

Durante el turbulento verano del escándalo Lewinsky, Coleman Silk, decano de universidad, ve cómo su carrera se arruina por pronunciar una expresión poco afortunada. La fiebre de lo políticamente correcto —la nueva caza de brujas en EE.UU.— desata, a partir de una sola frase, consecuencias devastadoras. Pero más allá de las acusaciones que recibe de ser racista o de llevar una aventura amorosa con una mujer joven, Silk guarda un secreto que debe ocultar si quiere sobrevivir en una sociedad opresiva. Philip Roth escribe con su habitual lucidez y nos deleita con la reaparición de su alter ego, el escritor Zuckerman.

 

Portada extraída de: Casa del Libro.

Quinua, el milagro de los Andes

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Todavía recuerdo aquellos tiernos años, cuando la quinua aun no era tan popular ni prestigiada, cocinarla significaba un proceso laborioso que comenzaba con la limpieza a mano de piedrecillas que se entremezclaban con el grano


 

Es inverosímil, increíble, mágica la transformación de la humilde quinua (sí, han oído bien “quinua” con esa sonoridad prestada de las lenguas indígenas, y no “quinoa” que es la pronunciación light, suavizada como para orejas gringas), pues hasta unas cuantas décadas atrás era considerada alimento de pobres, de campesinos, “comida de indios” solían espetar en algunos círculos de la alta suciedad, como canta bien nuestro amigo Calamaro.

Y hoy por hoy, la quinua figura hasta en mesa de reyes, gracias a los gringos (yanquis y europeos) que merced a sus investigaciones en el área de la nutrición nos dieron un sacudón en nuestras tozudas cabezas haciéndonos entender que estábamos desaprovechando un “superalimento” como catalogaron a este grano maravilloso que crece en los sitios más inhóspitos y desolados del extenso altiplano. Este pseudo-cereal (recuerda al mijo por la forma de la planta y la semilla) bautizado también como “grano de oro de los Andes”, “trigo de los incas” entre otros apelativos que las modas imponen, prospera en terrenos secos y salinos, de clima frío y a elevadas alturas, lugares donde ni siquiera la papa y la oca pueden sobrevivir.

 

Milanesa de pollo con quinua real. Foto: José Crespo Arteaga.

 

Así que resulta milagroso que en condiciones tan adversas se produzca uno de los alimentos más nutritivos (posee todos los aminoácidos esenciales, aseguran los nutricionistas) y completos ya que contiene también cantidades apreciables de calcio, fósforo y hierro. El hecho de que no contenga gluten también lo hace ideal para el consumo de personas celiacas. De ahí que muchos lo consideren el alimento del futuro, que quizás en las próximas décadas esté colonizando Marte junto a los humanos. Por lo pronto, los astronautas ya lo consumen mientras se entrenan para sus misiones espaciales, y eso no es ningún secreto celosamente guardado.

Los yanquis, tan listos como siempre y, sin mayores aspavientos, desarrollaron variedades propias pirateando semillas andinas, mientras Bolivia y Perú, los mayores productores mundiales,  se disputan codo a codo por la cuna natural de la quinua. Algunos cronistas refieren que su cultivo data de hace cinco mil años, que formaba parte de la dieta de las civilizaciones que se asentaron en la región como la tiahuanacota y posteriormente la incaica. En las comunidades más recónditas del altiplano poco importa de dónde viene su grano vital, ellos lo han cultivado desde tiempos inmemoriales, acaso el único alimento que les permitía sobrevivir en épocas de hambruna y escasez, en la soledad de las pampas que semejan paisajes marcianos.

 

Variedades de quinua. Foto extraída de: Agrowindo.

 

Y no otra sensación uno debe experimentar al visitar esos páramos de vientos infatigables, moteados cada tanto por lagunas dispersas y salares inmensos como países enteros. En esos ecosistemas extraños, desérticos y abrumadores, ver un campo de quinuas multicolores debe de ser la mayor alegría del mundo, entre kilómetros de tierras ocres y cenicientas, allá donde lo verde se hace escaso por designios de la naturaleza. Y dicen que en esos espacios intersalares, al sur del altiplano boliviano, se produce la variedad más selecta, la Quinua Real, que por su mayor riqueza proteínica y mejor tamaño casi toda es destinada a la exportación, a los mercados exigentes de Europa, Australia, Japón, Canadá, entre otros.

Todavía recuerdo aquellos tiernos años, cuando la quinua aun no era tan popular ni prestigiada, cocinarla significaba un proceso laborioso que comenzaba con la limpieza a mano de piedrecillas que se entremezclaban con el grano, luego era indispensable lavarla una y otra vez hasta que el rastro de saponina desapareciera para quitarle ese sabor amargo que tenía en crudo y que, casi siempre, pasaba a la sopa o guiso, malogrando la sazón en alguna forma. Todavía veo a mi madre (en mi mente) separando puntillosamente los menudos granos en un lado y las molestas piedrecillas en otro; todavía me veo a mí mismo recordando el desagradable sonido de los dientes chirriando al probar bocado, por culpa de alguna piedrecilla que se mimetizaba con la quinua.

 

Ensalada de quinua, lista para acompañar cualquier carne. Fotografía: José Crespo Arteaga.

 

Hoy se han facilitado las cosas de tal manera, que ni falta hace lavar el grano antes de sumergirlo en la cazuela. Y los tiempos de cocción también se han reducido a niveles parecidos a los del arroz. Parece que los productores han seguido domesticando al grano rebelde, creando variedades más amigables con el estómago y con el medio ambiente, por si las moscas. Para los más puntillosos y delicados existe la opción de la quinua orgánica, para tranquilizar sus conciencias y seguir haciendo caso a los llamados del marketing. Agua de cordillera y bosta de llama como abono les prometerán los vendedores.

Cada tanto le pido a mi madre que haga una sopa de quinua, que sea ¡bien real!, con todos sus chuños y habas, a la manera altiplánica. No hay cosa mejor para calentar el alma hasta lo más profundo y remitirnos hasta épocas antiquísimas. Ya la modernidad ha añadido lo suyo poblando los supermercados con infinidad de derivados: harinas, galletas, pastas, budines, barras energéticas, hojuelas para el desayuno, etc. Y para los paladares gourmet, restaurantes especializados en La Paz ofrecen sus finas creaciones desde entrantes hasta postres, y por si fuera poco, empieza a despuntar la producción de cerveza artesanal para cerrar con broche de oro el abanico de posibilidades que ofrece el grano. Amplio es el camino recorrido por la quinua milenaria.

 

Para disfrutar de esto, alguien dice que hay ir hasta el lejano Potosí. Foto extraída de: Cristianbolivia.blogspot

 

Mientras tanto yo salgo a atisbar por los mercados populares de mi ciudad, seguro de que en algún puesto la quinua sigue siendo una comida asequible, seguro de que en algún momento me toparé con una vendedora que ofrece la sencilla Phisara (quinua tostada y graneada, acompañada de cebolla verde, quesillo y habas) en coquetos platitos de barro veteados de verde esmeralda. Es un fascinante misterio el cómo una merienda del altiplano ha bajado hasta nuestros valles de choclos, chichas y locotos para quedarse para siempre.

Mientras tanto saboreen conmigo, aunque de manera figurada, los manjares que he ido presentando, a modo de recordar los almuerzos en que tuve la dicha de degustarlos. Pláceme de sobremanera aquel estofado de pollo con champiñones y pasas uvas, que la pericia de una joven cocinera supo combinar excelsamente con una guarnición de quinua negra. Ese contraste del guiso dulzón con el dejo mineralizado de la quinua parecía alimento de dioses y un golpe de fortuna para tristes mortales, como este gorrón privilegiado.

 

Estofado de pollo y champiñones con quinua negra. Fotografía: José Crespo Arteaga.

 

Cómo no recordar los fabulosos pasteles de quinua, que meses ha que no los he vuelto a probar: queso fundido sobre una capa de ahogado de cebolla y tomate, base de quinua blanca previamente cocida, aceitunas incrustadas y mucho cariño para dar el toque final a la sazón. Ahí la paro que se me podrían morir del antojo.

 

P.S. Y es que los Andes no sólo ofrecen insospechados manjares, sino tambien música entrañable, que refleja la melancolía y belleza de sus vastos páramos e imponentes montañas.

 

Día Internacional de la diversidad biológica

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Especial de la diversidad biológica


 

La región de los Andes del Norte y en particular el Eje Cafetero Colombiano, es una zona rica en biodiversidad y es reconocida como prioritaria para los esfuerzos de conservación. La región cubre menos del 0.015% de la superficie del país y alberga al 7% de las especies de plantas y animales (Instituto von Humboldt, 1997).

Lamentablemente, esta notable biodiversidad se ve afectada a lo largo de la región por la deforestación, la fragmentación de los bosques y la conversión en tierras agrícolas, ganaderas, por vías y asentamientos humanos en ciudades cada vez de mayor tamaño. Hasta hace relativamente poco tiempo, la región estuvo dominada por bosques, hoy solo se conserva alrededor de un 30% de ellos y muchos paisajes ahora están dominados por cafetales, potreros, plantaciones forestales y algunos cañaduzales.

La degradación del paisaje reduce y limita las opciones de desarrollo de las comunidades humanas e igualmente produce impactos negativos considerables sobre muchas comunidades de plantas y animales silvestres.

Así que con este Especial celebramos el Día Internacional de la Diversidad Biológica, porque de lo que se trata es de crear conciencia verde; conciencia que nos permita proteger, abogar, cuidar nuestros bienes invaluables e irrecuperables.

Bienvenidos.


¿qué significa el día internacional de la diversidad biológica?

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Cada 22 de mayo se celebra el Día Internacional de la Diversidad Biológica. Un evento creado por la Asamblea General de las Naciones Unidas como estrategia para informar, educar y concienciar a las personas sobre la conservación y protección de la Biodiversidad a nivel mundial.


 

Día Internacional de la Diversidad Biológica, 22 de mayo. 25 años defendiendo la biodiversidad

Este 2018 se cumplen 25 años del Convenio sobre la Diversidad Biológica. Desde 1992, la Convención se ha ido aplicando a través de la visión y el liderazgo de países, organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, comunidades indígenas y locales, la comunidad científica y los individuos a título personal.
Los resultados han sido considerables hasta la fecha. Se ha desarrollado una guía científica para la conservación de la diversidad biológica y la utilización sostenible de sus componentes en todo el mundo, han entrado en vigor las estrategias y planes de acción del Protocolo de Cartagena sobre Bioseguridad y el Protocolo de Nagoya sobre acceso a los recursos genéticos y participación justa y equitativa en los beneficios derivados de su utilización del Convenio sobre la Diversidad Biológica. Tras la adopción del Plan Estratégico para la Diversidad Biológica 2011-2020 las Partes han avanzado significativamente en el logro de varias de sus Metas de Aichi.
El Plan Estratégico se compone de una visión compartida, una misión, objetivos estratégicos y 20 metas ambiciosas pero alcanzables, las conocidas como Metas de Aichi. Sirve como un marco flexible para el establecimiento de objetivos nacionales y regionales y promueve la aplicación coherente y eficaz de los tres objetivos del Convenio sobre la Diversidad Biológica.

Organización de las Naciones Unidas

Fotografía: Felipe Ospina

 

Así Colombia ratifica las consignas de la Convención sobre Diversidad Biológica, su protección y conservación, mediante la Ley 165 de 1994 y materializada a través de la Política Nacional para la Gestión de la Biodiversidad y sus Servicios Ecosistémicos.

 


Convenio sobre la Diversidad Biológica (1992):

Vér acá.


 

 


Política Nacional para la Gestión de la Biodiversidad y sus Servicios Ecosistémicos: 

Ver acá.


 

Pero ¿qué es la biodiversidad o diversidad biológica y por qué es importante conservarla?

Bio-diversidad abarca todo el sinfín de organismos y sistemas de vida que hay en el planeta, como resultado del proceso de miles de millones de años de evolución. Su importancia es vital para el sostenimiento y equilibrio de la vida en la Tierra. Su uso adecuado asegura el sustento y desarrollo de los seres humanos y del resto de los seres vivos, y regula los diferentes ecosistemas manteniendo el equilibrio en el planeta.

Colombia, con 62.829 especies, es hoy un referente para la diversidad biológica de la Tierra, siendo el segundo país más bio-diverso, después de nuestro vecino Brasil, representando en el 1% de la superficie de la Tierra el 10% de toda la biodiversidad, y siendo el primer país con mayor número de especies de aves (1.937) y orquídeas, el segundo en plantas, anfibios, mariposas y peces dulceacuícolas(Plantas y animales que desarrollan todas sus funciones vitales en el agua dulce), tercero en palmas y reptiles, y cuarto en mamíferos.

 

Imagen extraída de: Instituto Humboldt

 

Colombia es el segundo país mega diverso del mundo, principalmente por la convergencia de grandes regiones bio-geográficas: Amazonía, Andina, Caribe, Insular, Orinoquía, y Pacífico. Nuestro país cuenta con 311 tipos de ecosistemas continentales y costeros. También se caracteriza por la importancia de los bosques naturales, que cubren el 53% del territorio nacional y concentran más de la mitad de las especies animales y vegetales terrestres. Además, la mitad de los páramos del planeta se encuentran en Colombia (en tan sólo 2% del territorio), siendo los responsables de abastecer el agua al 70% de la población.

Aún con toda esta riqueza natural, su conservación se ve afectada por el deterioro de los ecosistemas, explotación desmedida de los recursos, contaminación, uso de fuentes de energías no renovables (combustibles fósiles como el carbón y el petróleo), explotación minera, falta de energías alternativas y tecnologías limpias, deforestación, caza y tráfico ilegal de fauna, y la lista continúa.

Que la excusa de la celebración del Día Internacional de la Diversidad Biológica, nos recuerde y concientice que la Tierra nos brinda sus recursos para nuestra existencia, ¡cuidémosla!

 

Fotografía: Felipe Ospina.